Quiero una muerte digna
En junio, el Parlamento vasco aprobó una iniciativa para instar al Congreso de los Diputados a que despenalice el suicidio asistido y la eutanasia en España, modificando el Código Penal. Meses antes, en marzo, Francia avaló una ley para garantizar una muerte digna a los ciudadanos, con sedación profunda al final de la vida y garantizando que la voluntad del paciente, sin abordar la eutanasia activa. En ese país se ha vivido recientemente el caso de un paciente en estado vegetativo desde hace siete años, que llegó al tribunal de Estrasburgo. El derecho a una muerte digna es un debate muy vivo en Europa, que Andalucía lideró hace cinco años con la aprobación de una ley pionera, adjetivo que aún hoy puede mantenerse. Poco a poco van incorporándose otras comunidades, la última Galicia, con leyes para garantizar el derecho a una muerte digna y la garantía jurídica para los profesionales. Otras, como el País Vasco, apuestan por abrir el siguiente debate: la eutanasia, reclamando al Congreso de los Diputados su despenalización.