Soterramiento del AVE, ocho años perdidos y un camino incierto
La comisión de seguimiento se ha reunido en la Subdelegación del Gobierno. indegranada
La llegada del AVE es "la prioridad" para el Ministerio de Fomento, que sitúa el soterramiento y la Variante de Loja en "una segunda etapa". Es conocido y en la primera reunión de este miércoles de la comisión de seguimiento prometida por el ministro Rafael Catalá se ha vuelto a poner de manifiesto.
Se han desbloqueado las obras del AVE en Loja y también la información, tras un largo periodo de silencio, y los dos aspectos son importantes. Pero como ya ocurrió con la visita del ministro, más allá de ese importante paso que supone la reactivación de los trabajos de la Alta Velocidad, que estarán concluidos para el próximo verano y que permitirán la llegada del AVE en otoño de 2017, no hay avances ni certidumbres para el soterramiento ni para la Variante de Loja, salvo el compromiso de volver a la casilla de salida.
En ambos casos, según ha explicado a los periodistas el secretario general de Infraestructuras, Manuel Niño, que ha presidido la reunión, se retomarán los primeros proyectos y cálculos presupuestarios que ya se manejaron en 2008 y que, como ha reconocido, habían quedado "ralentizados" porque la prioridad había sido la llegada de la Alta Velocidad.
El inicio esta tarde del debate de investidura ha trastocado la representación en la comisión de seguimiento. No han estado los representantes de la provincia en las Cortes. Sí los de los grupos municipales. Ha sorprendido la presencia, por el PSOE, del exdiputado Manuel Pezzi. En el ámbito institucional, el alcalde Granada, Francisco Cuenca, el presidente de la Diputación, José Entrena, y esta vez sí, la delegada del Gobierno andaluz en Granada, Sandra García.
Junto a ellos los empresarios y finalmente también los representantes de los colectivos ciudadanos, Francisco Rodríguez por la Marea Amarilla y Antonio Campos por AVE sí pero no así. Tanto Ayuntamiento como Diputación habían exigido su presencia. Según el secretario general de Infraestructuras, Fomento siempre lo tuvo presente y ha achacado a un "malentendido" la polémica. Sus opiniones, ha destacado en un tono radicalmente distinto al que empleó en junio el secretario de Estado Gómez-Pomar, son "bienvenidas". Incluso ha enfatizado que serán un cauce para transmitir la información que se transmita en la comisión de seguimiento a los ciudadanos.
Niño ha destacado la voluntad de "transparencia" de Fomento y la voluntad de transmitir la evolucion de los trabajos y, si los hubiera, los problemas. Y, tras elogiar el tono "productivo" de la reunión, ha calificado de "muy interesantes" todas las aportaciones planteadas en el encuentro.
En la reunión no había representación de los sindicatos, que han formado parte activa de la Mesa del Ferrocarril.
Para la segunda etapa de la que vuelve a hablarse, el Ministerio recuperará los trabajos que ya se adelantaron respecto a la Variante de Loja, para la que se fijó un presupuesto de 400 millones de euros, y los de la integración de la Alta Velocidad a su paso por La Chana, que no solo incluye el soterramiento, también el desvío de la línea de Moreda, como ha recordado Niño.
En el caso de la variante de Moreda habría que recuperar la tramitación ambiental, además de someter a información pública ese proyecto y el del soterramiento. Retomar este debate nos lleva ocho años atrás, al protocolo suscrito entonces. Como ahora destaca Fomento, ese protocolo es "una declaración política", no un convenio, y por tanto obligaría posteriormente a cerrar su reflejo presupuestario.
Al hablar de cantidades, hay otra fecha importante, en este caso 2011, cuando se produjo el "primer intento" de llegar a un acuerdo económico que fijaba la aportación del Ministerio en 200 millones de euros, pero que necesitaba concretar las aportaciones del resto de administraciones. Ahora las condiciones económicas serán mucho más ajustadas porque las cantidades barajadas en 2008 y 2011 son inviables en este momento, tras años de crisis, recortes presupuestarios y limitaciones por el cumplimiento del déficit público. En 2008, como ha recordado el representante de Fomento, se llegó a estimar el coste del desvío de Moreda y el soterramiento en más de 700 millones; 500 en 2011. Las circunstancias han cambiado tanto que tampoco se podría costear la operación con las plusvalías.
Incertidumbre agravada por el coste económico
La lectura económica por tanto es la que arroja más incertidumbre al debate retomado ahora sobre el soterramiento del AVE. En cualquier caso, el compromiso transmitido por el secretario general de Infraestructuras a la comisión de seguimiento es que se reiniciarán los trabajos que ya estaban en marcha en los próximos días.
Pocas esperanzas para la recuperación inmediata de las conexiones ferroviarias reponiendo los servicios entre Granada y Barcelona. Se ha remitido a lo que dijo el ministro: se está analizando por parte del Ministerio.
Tras recordar la entrada en vigor de las nuevas tarifas a principios de noviembre -de 30 euros para el viaje bus-tren a Madrid y de 40 euros a Barcelona- y apuntar la posibilidad de poner en marcha una campaña publicitaria para darlas a conocer, el representante de Fomento ha vuelto a pedir disculpas a los granadinos porque el bloqueo de las obras "se ha prolongado en el tiempo", aunque ha abogado por "mirar al futuro". La llegada del AVE, ha enfatizado Niño, permitirá que el trayecto con Madrid se haga en tres horas menos cuarto y, según las previsiones de Fomento, duplicará el número de viajeros -de 600.000 a 1.200.000-.
Visita a Loja antes de la comisión de seguimiento. Por la mañana los integrantes de la comisión comprobaron en Loja el reinicio de las obras. Según Niño, la actividad irá "creciendo"
Fomento se ha comprometido a suministrar un cronograma "más detallado", así como la documentación sobre las distintas alternativas para los accesos a Granada. El objetivo es que antes de que finalice el año pueda volver a reunirse la comisión, un plazo que permitiría analizar toda esa documentación existente.
Al finalizar la reunión, el alcalde, Francisco Cuenca, ha asegurado que salía con una sensación "agridulce". El lado dulce es la llegada del AVE en otoño, "un logro" que ha atribuido a la Mesa del Ferrocarril y a los vecinos y colectivos que llevan tiempo peleando. Es "un avance", pero como ha señalado, "queda mucho por hacer. Y en ese sentido se ha referido a la parte que queda por despejar, precisamente cómo abordar los compromisos de la segunda fase en la que Fomento enmarca la integración y la Variante de Loja.
Por ello ha exigido un cronograma definido y "respuestas", no solo para la entrada soterrada en Granada, un aspecto "consensuado" por todos los grupos, también para la Variante de Loja pues hay tramos en los que el AVE tendrá que reducir su velocidad a 60 kilómetros por hora, según Cuenca.
A juicio del alcalde, para el nuevo gobierno Granada y las infraestructuras deben ser "la máxima prioridad", y no solo -ha advertido- es una cuestión política, debe tener un reflejo presupuestario.