El Sindicato de Enfermería (SATSE) de Andalucía ha celebrado el anuncio de la Junta sobre la derogación de las órdenes de fusión hospitalaria de Granada y Huelva, órdenes contra las que lleva litigando desde su publicación en 2014 llegando incluso al Tribunal Supremo en el caso de Granada. En este sentido, SATSE considera "una buena noticia" la derogación y confía en que sirva como "nuevo punto de partida" para las negociaciones sobre el diseño del modelo organizativo sanitario para el que, advierte, "no rebajará ninguna de sus reivindicaciones".

Según recuerda el Sindicato de Enfermería las fusiones hospitalarias en Granada y Huelva llevaban vigentes desde el 1 de diciembre de 2014, fecha en la que se publicó en BOJA las órdenes por las que se hacía oficial la unificación de los hospitales Infanta Elena y Juan Ramón Jiménez de Huelva, así como la de los hospitales Virgen de las Nieves y San Cecilio de Granada, en el Complejo Hospitalario de Huelva y Complejo Hospitalario de Granada respectivamente.

En este sentido, SATSE, sindicato mayoritario de la sanidad pblica andaluza, recalca que la las órdenes de fusión llegaron "impuestas desde su inicio, sin llevar a cabo la obligatoria negociación con los sindicatos", recordando que la Administración sanitaria convocó únicamente una reunión de la Mesa Sectorial para "aparentar una falsa negociación colectiva y realizar una tramitación acelerada de la orden de fusión de las Áreas Hospitalarias".

En la misma línea, el Sindicato de Enfermería expone que en las órdenes que regulaban las fusiones "no se explicaban los factores geográficos, socioeconómicos, demográficos, laborales, epidemiológicos, culturales, climatológicos y de dotación que aconsejen precisamente la fusión hospitalaria, con la consiguiente reducción de plantilla y las movilidades de personal y supresiones de servicios que se han estado llevando a cabo".

En definitiva, concluye SATSE, "se han estado llevando a cabo una fusión de envergadura de una forma caprichosa, arbitraria y carente de toda lógica" para mejorar el sistema sanitario público, motivo por el que, confía, que con el paso dado por la Junta de Andalucía sirva para "sentar las bases para consensuar el modelo organizativo teniendo en cuenta las necesidad de ciudadanos y profesionales".

Dimisiones en Salud

De otro lado, respecto a las dimisiones del viceconsejero de Salud, Martín Blanco, y el gerente del SAS, José Manuel Aranda, y el nombramiento de María Isabel Baena Parejo y Mariano Marín Patón para dichos cargos, respectivamente, el Sindicato de Enfermería lo ha valorado como "una oportunidad para abrir vías de diálogo" entre la Administración y los representantes de los trabajadores y confía en que estos relevos "no demoren la resolución de los procesos abiertos actualmente".

SATSE, como sindicato mayoritario, ha mostrado su "predisposición a la negociación" siempre que se basen en "un compromiso claro con los ciudadanos, con los profesionales y con los representantes, de que el modelo de sanidad pública va a ser un modelo sanidad pública, gratuita y universal, añadiendo financiación y provisión pública como único medio para garantizar los estándares de calidad a los que estaban acostumbrado los ciudadanos andaluces y que se ha venido deteriorando por los años de recortes".

Entre las principales reivindicaciones, el Sindicato de Enfermería continuará reclamando una" apuesta por la consolidación de las plantillas de Enfermería", actualmente con un déficit de en torno a 7.000 enfermeras para alcanzar la media nacional por habitantes,  la revisión del actual modelo de Unidades de Gestión Clínica que está impuesto por el SAS o el desarrollo de la Categoría de Enfermera Especialista en la sanidad pública andaluza, entre otras demandas.