Artículo de Opinión

'Palestina no es Ucrania'

Política - Paco Vigueras - Jueves, 12 de Octubre de 2023
Paco Vigueras, periodista y escritor, pone el foco y llama a reflexionar, en este artículo de opinión, sobre la situación del pueblo palestino.
Movimiento BDS Palestina

Formo parte, desde hace años, del movimiento andaluz de solidaridad con el pueblo palestino. Colaboro en la campaña BDS (Boicot, Desinversión y Sanción), con la que pedimos a todos los ciudadanos del mundo que no consuman productos israelíes, fabricados en los territorios ocupados, para obligar al régimen de Tel Aviv a cumplir la legalidad internacional. Y he participado en muchas manifestaciones de protesta, cada vez que el ejército israelí bombardea o masacra al pueblo palestino, con total impunidad. Ayer mismo asistí a una concentración muy emotiva, en la que niños palestinos en el exilio clamaron justicia para su pueblo y el derecho a volver a casa.

"Ayer mismo asistí a una concentración muy emotiva, en la que niños palestinos en el exilio clamaron justicia para su pueblo y el derecho a volver a casa"

Esta vez, la resistencia palestina ha roto el bloqueo ilegal de Gaza para golpear con dureza en los territorios ocupados por el régimen sionista de Israel. Como dice el periodista israelí, Gideon Levy: “Imposible encarcelar a dos millones de personas, sin esperar un precio cruel”. La milicia palestina ha logrado burlar al Mosad israelí y a la propia CIA norteamericana, los servicios de inteligencia más poderosos del mundo, demostrando que no son tan infalibles como pensábamos. Ya se acabó la imagen de los soldados israelíes disparando a jóvenes palestinos desarmados. La lucha desigual entre David y Goliat, balas contra piedras, parece llegar a su fin. Ahora, el Ejército israelí tendrá que enfrentarse con un pequeño ejército de 20.000 milicianos palestinos, bien organizados y dispuestos a recuperar su tierra, ocupada por Israel, desde hace 70 años. Una injusticia que la comunidad internacional ha permitido, sin hacer absolutamente nada para restablecer la legalidad.

Los palestinos han dicho basta ya a un régimen que los tiene arrinconados, hacinados, humillados, masacrados y bloqueados en Gaza, una estrecha franja de terreno, de 41 kilómetros de largo por 12 kilómetros en su parte más ancha y 6 en la más angosta. Cuando José Saramago visitó Gaza en 2002, el Premio Nóbel de Literatura la describió como el campo de concentración más grande del mundo. Y el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, la describe como “el infierno en la tierra”. 

Pero todo esto no podría hacerlo Israel sin la ayuda de Estados Unidos y la complicidad de la Unión Europea, que colaboran en silenciar e ignorar al pueblo palestino. De hecho, los medios informativos occidentales  hablan de guerra entre Israel y Gaza, o entre Israel y Hamás, que es una forma de negar la existencia de Palestina. La hipocresía occidental es inadmisible, pues envía tanques y armamento a Ucrania, para hacer frente a la invasión del Ejército ruso, pero abandona a Palestina, que soporta más de siete décadas de ocupación israelí.  

"En Ucrania, las condenas y las sanciones contra Rusia son unánimes, pero en Palestina, el silencio es absoluto, pues Israel cuenta con el apoyo incondicional de Estados Unidos, que ha impuesto a la Unión Europea una especie de ley mordaza"

Lo que vale para Ucrania, no vale para Palestina. En Ucrania, las condenas y las sanciones contra Rusia son unánimes, pero en Palestina, el silencio es absoluto, pues Israel cuenta con el apoyo incondicional de Estados Unidos, que ha impuesto a la Unión Europea una especie de ley mordaza. Lo que está pasando en Palestina hace que los líderes de los países occidentales pierdan credibilidad, pues las palabras libertad y democracia suenan a retórica en sus bocas. Insisto, no se puede entender la impunidad con la que Israel lleva tantos años masacrando al pueblo palestino, sin que la comunidad internacional diga nada.

Y una vez más, la doble moral de Occidente, que condena el ataque de Hamás, pero guarda silencio sobre los bombardeos de represalia, con los que el régimen sionista está machacando a la Franja de Gaza, con una potencia de fuego desproporcionada. Pocas veces muestran los telediarios imágenes de familias palestinas masacradas y evitan enseñarnos la escena desgarradora de un padre llorando la muerte de su hijo, reventado por un misil y convertido en víctima colateral de este conflicto interminable. No conforme con esta represalia, el régimen de Tel Aviv no se limita a perseguir a los responsables del ataque, sino que aplica a la población civil un castigo colectivo, dejando sin luz, agua ni alimentos a dos millones de personas, la mitad de ellos menores de edad. De nuevo, es clamoroso el silencio de la comunidad internacional.

"Este largo conflicto está provocando la decadencia moral de Occidente"

En cambio, cuando las víctimas son israelíes, esas imágenes abren los telediarios. Según los medios occidentales, si los soldados israelíes disparan, tienen derecho a defenderse. Pero si disparan los milicianos palestinos, entonces son terroristas. Este largo conflicto está provocando la decadencia moral de Occidente. La contraofensiva de las milicias gazatíes ha puesto de nuevo a Palestina en el mapa y nos recuerda que la única solución definitiva al conflicto es que el régimen israelí se retire de los territorios ocupados y la comunidad internacional proceda a la creación de un Estado palestino.

Paco Vigueras es periodista y escritor. 

 

Foto de portada Movimiento BDS Palestina: facilitada por el autor