Balance del primer año de Gobierno municipal en la capital: la sombra de corrupción acabó con Torres Hurtado
Un mes para empezar a distanciarse de los 13 años de PP
Un año después de que José Torres Hurtado afrontara su cuarto mandato, ya es pasado. Hace un mes el socialista Francisco Cuenca tomó las riendas del Ayuntamiento sobre el que se cernía la sombra de la corrupción, que provocó también la salida por la puerta de atrás de la concejal de Urbanismo, Isabel Nieto, y el de Presidencia y Transparencia, Sebastián Pérez. Los dos últimos meses resumen el primer año de mandato municipal. Desde que se destapa el caso Nazarí, el fin de la era de 13 años consecutivos del PP.
J.Algarra/Ayuntamiento
Cuenca atiende a los medios en una de sus primeras intervenciones tras la investidura.
Nueve meses exactos después de la toma de posesión de Torres Hurtado como alcalde, gracias al apoyo de Ciudadanos, salía detenido de su vivienda en el centro de Granada, en el marco de una operación policial y judicial sobre una supuesta trama de corrupción en el área de Urbanismo del Ayuntamiento de la capital. También fue detenida la concejal de Urbanismo, entre el total de 17, entre ellos funcionarios municipales del área y empresario.
Fue el principio del fin político de Torres Hurtado y del PP en el Ayuntamiento de Granada, tras gobernarlo durante 13 años consecutivos, aunque por primera vez en minoría tras los comicios del año pasado.
Ciudadanos, que hace un año le dio la alcaldía, se la arrebató el pasado 5 de mayo para darle una oportunidad al socialista Cuenca, con el apoyo de Vamos Granada e IU. La sombra de corrupción hizo posible el cambio de Gobierno.
Agenda frenética
Desde entonces, el gobierno municipal de socialista, formado por el alcalde y siete concejales, puso en marcha una frenética agenda para distanciarse de la larga etapa popular. Primero, con la disminución de las tenencias de alcaldía (solo dos frente a los cinco del PP); el organigrama, con la creación, como declaración de intenciones, del área de Derechos Sociales -que dirige Jemi Sánchez- y el restablecimiento de las relaciones con la Junta de Andalucía, rotas en la era PP, que empleó con cierto rédito la confrontación, como con la gestión de la Alhambra, centro de todas las críticas.
El alcalde prescindió desde el primer día del vehículo oficial y hasta se desplaza en el transporte urbano, como cuando tras la investidura cumplió visita institucional a la rectora de la Universidad de Granada, Pilar Aranda. También de los escoltas. Cuando es necesario por agenda o distancia, comparten los miembros del gobierno los coches oficiales, mientras pone a la venta aquel blindado que llevaba al alcalde.
Cuenca abrió el Ayuntamiento a la Marea Amarilla que reclama el AVE soterrado. j.a./ayuntamiento
Mientras, tendió puentes con Laura García Lorca en un viaje relámpago a Madrid para restablecer el entendimiento y posibilitar la vuelta al diálogo con el propósito de que pronto llegue el legado del poeta al centro de la plaza de la Romanilla.
Y más: declaró la lucha contra los desahucios (junto con las organizaciones han logrado para dos intentos), paralizó las exhumaciones masivas decretadas en el cementerio por no pagar el canon -aunque aún debe de aclarar el procedimiento- y abrió el Ayuntamiento a la Marea Amarilla. De hecho, Cuenca impulsó la Mesa del Ferrocarril, para exigir el fin del aislamiento ferroviario y el restablecimiento de las conexiones por tren y el soterrameinto del AVE. El próximo martes, si Fomento no vuelve a aplazar la reunión por tercera vez consecutiva, se reunirán en Granada con el secretario de Estado de Infraestructuras.
La última actuación, recuperar la gestión pública de las pistas polideportivas de Albayda, el Antonio Prieto.
Medidas en apariencia estética, que no suponen apenas gasto e inversión pero que marcan distancias con respecto al PP.
El alcalde también se ha comprometido a recuperar como servicio público la atención de ayuda a domicilio para 2017.
Una ‘herencia’ envenenada
Anunciada las auditorias en las áreas de Urbanismo, Personal y Economía, aunque todavía sin concretar, pronto comenzó a notar el gobierno socialista las primeras ‘herencias’ envenenadas de los gobiernos municipales del PP. Empezando por la cuantiosa deuda -que incluyendo la financiera supera los 350 millones-, que abocan a prorrogar los presupuestos este año e 'hipotecan' las cuentas para, como poco, 2017.
Junto a ello, el goteo incesante de sentencias contras gestiones dudosas en el área de Urbanismo, que obligan a pagar indemnizaciones millonarias o la losa dejada en el transporte público por el modelo de la LAC. Se precisan 21 millones hasta final de año para garantizar el funcionamiento. Sobre el modelo, ya barajan alternativas, como las dos líneas ‘exprés’ para enlazar los barrios.
Francisco Cuenca, con los portavoces de los grupos municipales. miguel rodríguez
Un difícil gobierno en minoría
No es tarea fácil gobernar con siete concejales y el alcalde, una minoría que requiere de los grupos de la oposición para sacar adelante iniciativas. Ya lo ha comprobado el equipo de gobierno socialista, que no pudo sacar adelante la estructura de cargos directivos que le apoyará en las tareas de gestión. Pretendía reducirla y pasar de 20 a 17, pero no logró la mayoría absoluta que requería. Solo Ciudadanos votó a favor, mientras que Vamos Granada e Izquierda Unida se abstuvieron, alegando que no tenían garantías de que esa reducción generara ahorro efectivo ocupándose por funcionarios del Consistorio.
Pese a no lograr la reducción, lo que sí ha comenzado es el cambio en el relevo en esos puestos. Urbanismo, señalada por la Operación Nazarí, ha sido una de las áreas en las que ha comenzado la renovación. También Economía.
Cuenca: “En un mes, hemos devuelto la ilusión a la ciudadanía”
El alcalde de Granada, el socialista Francisco Cuenca, consideró que en tan solo un mes, el gobierno municipal socialista “ha devuelto la ilusión a la ciudadanía”.
“Hemos levantado las alfombras y abierto las ventanas para que entre aire fresco”, señaló el alcalde sobre el primer mes de gestión socialista al frente del Ayuntamiento de la capital, interpelado por El Independiente de Granada en un acto de la campaña socialista. Y añadió que los socialistas “estamos demostrando que hay otra manera de hacer las cosas, atendiendo a la ciudadanía, empatizando con sus problemas, estando cercanos”.
En su reflexión el alcalde citó como logros en tan solo 30 días el inicio de la recuperación de servicios y patrimonio públicos frente a las privatizaciones del PP y, como prioridad, la lucha contra el desempleo, con la puesta en marcha del plan de reinserción laboral, que beneficiará a un millar de parados.
“Hemos parado tres desahucios, mediando junto a las plataforma con los bancos y junto a la Diputación, impulsamos el plan estratégico para marcar la Granada del futuro”, señaló el alcalde quien destacó el restablecimiento de las conversaciones con Laura García Lorca.
