"Me alegro de que copien" la iniciativa, ha exclamado el portavoz socialista, Francisco Cuenca, para recordar que fue su grupo el que ya propuso instalar estos sistemas de vigilancia únicamente en los edificios catalogados o declarados Bien de Interés Cultural. 

Porque para Cuenca, la idea "sin planificación" lanzada por Torres Hurtado, "da miedo". Tras preguntarse qué van a hacer con la otra mitad de Granada, no solo el patrimonio, afectada por estas pintadas, y criticar que haya estado "doce años mirando para otro lado", le ha reclamado "un plan serio antipintadas" y menos "chorradas". Un plan de limpieza con otro programa complementario de educación, para hacer ver que hay una diferencia entre "el arte" y "las guarradas".

El portavoz de IU, Francisco Cuenca, por su parte, ha advertido que estos sistemas pueden conculcar derechos fundamentales. Ha considerado que la primera "llamada" a hacer pintadas la hace el propio Ayuntamiento, por no cumplir con sus obligaciones de limpieza. "No limpia y más pintadas llaman a más pintadas", ha dicho para destacar que en ciudades como Sevilla o Madrid funcionan brigadas especiales y cuadrillas que, a llamadas alertando de estas pintadas, las limpian. Esa agilidad para retirarlas es lo que está haciendo que se reduzca en esas ciudades el número de pintadas. También ha pedido al alcalde que no tenga una mirada "selectiva", pues el problema afecta a todo el Albaicín y el casco histórico, no solo al patrimonio.

Por su parte, la concejala de Vamos Granada Pilar Rivas ha puesto el acento en cómo se diseñará y evaluará la ejecución de los proyectos y planes que anuncia el gobierno local, que el miércoles informó de un plan especial de limpieza de fachadas. En este sentido ha advertido que hay solo un técnico municipal para ese cometido. "Así de importante es la evaluación previa y final de los proyectos", ha dicho.