'La climatización de los colegios e institutos en Andalucía'

Es sábado 21 de mayo y “dice la tele” que estamos en el mayo más caluroso de lo que va de siglo. Constatamos que “el primo” de Rajoy estaba equivocado cuando negaba el cambio climático. El planeta se calienta de forma alarmante y las “olas de calor” son cada vez más frecuentes por desgracia.
Aunque en todos los trabajos se sufren estos calores exagerados, yo en esta ocasión me quiero referir al trabajo educativo. Los profesionales de la educación tienen que realizar su trabajo en aulas no acondicionadas, y que no cumplen los requisitos de la Ley Laboral que estipula que los centros de trabajo deben tener una temperatura máxima de 27 grados centígrados. Con 25, 30 ó 35 alumnos es muy frecuente en Andalucía, llegar a 36 ó 37 grados en las aulas.
En 2017, padres, madres, alumnos y profesores de colegios públicos de Sevilla, Huelva y Córdoba se movilizaron en ropa de baño al grito de "aulas sí, saunas no" a las puertas de los centros escolares para protestar
Esta situación, provocó en junio del 2017 que un grupo de padres y madres, alumnos y profesores de colegios públicos de Sevilla, Huelva y Córdoba se movilizaran en ropa de baño al grito de “aulas sí, saunas no” a las puertas de los centros escolares para protestar. La oposición política (PP, Podemos, Ciudadanos e IU) se apuntó a la protesta y exigieron una Ley de Bioclimatización.
El Gobierno de entonces actuó con un Plan de choque en 2017 y 2018 de 14 y 17 millones de euros respectivamente, que a todas luces era insuficiente, teniendo en cuenta que Andalucía cuenta con más de 6.000 centros públicos. Se pretendía gastar 100 millones de euros al año, pero llegaron las elecciones de 2 de diciembre de 2018 y de forma inesperada (porque hay que recordar que ganó el PSOE) se produjo un cambio de Gobierno en Andalucía, que propició que PP y Ciudadanos con el apoyo indispensable de Vox llegaran al poder.
La primera pregunta que podemos hacernos es ¿Qué ha hecho el Gobierno andaluz en estos cuatro años con este problema urgente?
Tuvieron que pasar 18 meses en el gobierno para que se abordara el problema “urgente” de la bioclimatización de las aulas, y se aprobó el 3 de junio del 2020 a propuesta de la oposición la Ley de Bioclimatización que afectaría a 7.000 centros. La norma establece un plazo máximo de 18 meses para acondicionar los centros en peor estado. En la actualidad, los ayuntamientos se quejan de que la Consejería de Educación, una vez más, como ha ocurrido en la pandemia sanitaria con los gastos de desinfección y de la limpieza, quiere cargar estas actuaciones a los municipios.
¿Dónde están las protestas de los padres y las madres, los profesores, los alumnos, los sindicatos, la Escuela de Calor...?
La segunda pregunta es ¿dónde están las protestas de los padres y las madres, los profesores, los alumnos, los sindicatos, la Escuela de Calor…..? Calor sigue haciendo y mucho y las condiciones de las aulas en estos cuatro años del Gobierno del PP, Ciudadanos y Vox en la sombra, no han mejorado la situación. Podríamos decir que aprobaron una ley al año y medio del llegar al Gobierno arrastrados por la oposición y sin intención de cumplirla. Ya sabemos que sin presupuesto las leyes tienen poco recorrido. A todas luces queda claro que “una cosa es predicar (cuando se está en la oposición) y otra es dar trigo (cuando s está en el Gobierno)”.
Hace un año la Consejería anunció a bombo y platillo un Plan de Infraestructuras Educativas y una actuación en 400 centros de la que casi nada se ha ejecutado
Hace justamente un año la Consejería anunciaba a bombo y platillo un Plan de Infraestructuras Educativas 2020-2027 y una actuación en 400 centros de la que casi nada se ha ejecutado. Además siempre me ha parecido impresentable hablar de actuaciones más allá de la legislatura, que como todos sabemos acababa el 2 de diciembre del 2022 y previsiblemente se iba a adelantar, como así ha ocurrido con la convocatoria de elecciones para el próximo 19 de junio.
Lo último que nos dice el consejero de Educación en el pasado mes de abril, es que la bioclimatización se hará con fondos europeos, que es una forma de reconocer que no tenían presupuesto previsto y no saben a día de hoy cuando empezarán, ni en qué plazos ejecutarán dichas obras.
Hasta los 7.000 centros donde la Ley de Bioclimatización tiene previsto que se actúe, queda mucho camino por andar y yo diría que mucho calor que pasar, salvo que el próximo mes de junio se produzca un cambio de Gobierno en Andalucía y se de un impulso definitivo y urgente a estas actuaciones que después de cuatro años siguen pendientes.




























