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El primero de octubre, los 6.500 afiliados y afiliadas están llamados a elegir al próximo secretario general

Aparatos frente a militancia, la encrucijada en el PSOE de Granada

Política - Juan I. Pérez - Domingo, 3 de Septiembre de 2017
Por primera vez los afiliados y afiliadas elegirán al próximo secretario general del PSOE de Granada en primarias, al que optan tres candidatos, pero en realidad solo dos modelos: aparatos frente a militancia. Este es un análisis sobre el proceso congresual más disputado y decisivo de la organización socialista de la provincia de Granada.
Placa en la sede provincial del PSOE de Granada, en Torre de la Pólvora.
P.V.M.
Placa en la sede provincial del PSOE de Granada, en Torre de la Pólvora.

El nuevo PSOE resultante del 39 Congreso Federal, que ratificó a Pedro Sánchez por segunda vez como cabeza del partido, -aunque en esta última ocasión, en mayo pasado, tras derrotar ampliamente en la primarias a Susana Díaz, con un liderazgo más que fortalecido al reunir más del 50 por ciento de los votos-, dejó al menos un par de cosas claras: el giro a la izquierda y la recuperación de la militancia, como eje de la organización. Aquellas primarias significaron el fin de los aparatos, esas estructuras orgánicas de poder que dan y quitan, mientras que las jefaturas territoriales quedaron seriamente cuestionadas por la fuerza del voto secreto en las urnas.

Fue la militancia quien derrotó en aquellas primarias no solo a Susana Díaz, sino a todos los barones y a la inmensa mayoría de líderes socialistas regionales y provinciales que con la misma fuerza se volcaron con la presidenta andaluza, como denostaron a Pedro Sánchez, a quien forzaron a dimitir el pasado 1 de octubre

Fue la militancia quien derrotó en aquellas primarias no solo a Susana Díaz, sino a todos los barones y a la inmensa mayoría de líderes socialistas regionales y provinciales que con la misma fuerza se volcaron con la presidenta andaluza, como denostaron a Pedro Sánchez, a quien forzaron a dimitir el pasado 1 de octubre.

No es la primera vez en la historia del PSOE que la militancia se rebela contra el aparato. El caso más notorio fue en 1998, el de Josep Borrell sobre Joaquín Almunia, apoyado por Felipe González, quien también respaldó a Susana Díaz, como lo hizo José Luis Rodríguez Zapatero.

Más por la acción del secretario general del PSOE y de su equipo, que por la de Susana Díaz y sus seguidores, los socialistas han logrado pacificar la organización y tomar la iniciativa institucional.

Busto de Pablo Iglesias, fundador del PSOE y la UGT, en la entrada de la sede provincial del PSOE. P.V.M.

En el 13 Congreso Regional del PSOE, sin rival, Susana Díaz revalidó su dominio en una Andalucía, en la que todas y todos los socialistas remaron (y reman) en la misma dirección: la que señala la presidenta de Andalucía, en un momento político extremadamente delicado, que puede derivar en un adelanto electoral, que solo desea el PP, por las exigencias de Ciudadanos, leal socio de la Junta hasta ahora, que trata de contrarrestar el desgaste de ser la muleta de Rajoy, en la comunidad andaluza, con su apoyo al socialismo andaluz, con no menos desgaste.

Aunque lo podían haber hecho, los partidarios andaluces de Pedro Sánchez en las primarias renunciaron a presentar batalla en el Congreso Regional: un grupo organizado que casi se movió en la épica en las primarias, como más si cabe los defensores de Patxi López, en una tierra dominada de arriba abajo por el poder de Susana Díaz.

En el proceso congresual del PSOE de Granada se reproduce -evidentemente, guardando las distancias- lo acaecido en las primarias en el PSOE federal, que marcó el nuevo camino de los socialistas. ¿Quién es el que mejor lo puede conducir en la provincia de Granada? Será una de las respuestas que los afiliadas y afiliadas socialistas deben responder cuando afronten su voto el próximo 1 de octubre.

Tres candidatos, dos modelos

Tres candidatos optan a la secretaría general del PSOE de Granada. Por el orden en el que anunciaron sus aspiraciones, Chema Rueda, secretario general de los socialistas de la capital granadina; Noel López, alcalde de Maracena y secretario local, y José Entrena, presidente de la Diputación y vicesecretario general del PSOE de Granada.









Tan evidente es que José Entrena supone la línea continuista de la dirección saliente, dirigida por Teresa Jiménez en estos últimos siete años, como que Chema Rueda representa la opción más revolucionaria, paradójicamente, la que emana del 39 Congreso Federal

Tan evidente es que José Entrena supone la línea continuista de la dirección saliente, dirigida por Teresa Jiménez en estos últimos siete años, como que Chema Rueda representa la opción más revolucionaria, paradójicamente, la que emana del 39 Congreso Federal. Noel López, por su parte, intenta el asalto a la dirección, tras fracasar en el pulso que lanzó a la ejecutiva de Teresa Jiménez cuando quiso ser el candidato socialista a la presidencia de la Diputación.

Alentado por el núcleo de críticos con la dirección provincial –muchos cargos electos, y tambien cargos institucionales, que disfrutan por la mediación de la ejecutiva provincial- Noel López comenzó a recabar apoyos por la provincia. Pero midió mal y, finalmente, ni siquiera presentó su candidatura, frente a la de José Entrena, que preside la Diputación de Granada.

Aquel fallido intento se saldó con su dimisión en la ejecutiva provincial como secretario de Política Municipal y con su repliegue a Maracena, cuyo Ayuntamiento gobierna con mayoría absoluta, poderoso bastión socialista desde donde intenta de nuevo dar el salto provincial. No le ayuda el demoledor informe fiscalizador de la Cámara de Cuentas que  el organismo difundió el pasado mes de julio.

Entrena y López, pese a sus diferencias, tienen en común su apoyo en las primarias del PSOE a Susana Díaz. Rueda apoyó a Pedro Sánchez desde el principio, cuando algunos y algunas lo veían, incluso, temerario, por el incontestable poder de influencia de Susana Díaz en Andalucía.

Noel López, por su parte, intenta el asalto a la dirección, tras fracasar en el pulso que lanzó a la ejecutiva de Teresa Jiménez cuando quiso ser el candidato socialista a la presidencia de la Diputación

Pero Entrena y López comparten otros puntos en común: su apoyo en aparatos del partido. Entrena, evidentemente, como número dos de la dirección provincial; el alcalde de Maracena, como presidente del pujante Consorcio para el Desarrollo de Vega-Sierra Elvira, una pequeña diputación, con 33 municipios, que le permite mantener una férrea estructura de poder.

Ni Entrena ni López han sido especialmente críticos con la Junta de Andalucía, no así con el Gobierno central. Rueda se manifestó antes, incluso, del proceso con absoluta claridad sobre algunas áreas de gestión de la Junta notablemente mejorables, como la reordenación sanitaria o el Metro.

Además, tanto el presidente de la Diputación, como el alcalde de Maracena, votaron en el Congreso del PSOE-A a favor de exigir el 20 por ciento de avales a los candidatos, en contra del 3 por ciento, establecida por el Congreso Federal para promover la participación democrática interna.

Este voto, que se impuso ampliamente en el Congreso Regional y que el PSOE de Granada ha adoptado para las primarias, podría ser superfluo si no fuera porque el 3 por ciento de avales fue una propuesta que llevaba aprobada la organización socialista granadina y que surgió de la agrupación de Armilla, cuyo secretario general, Gerardo Sánchez, apoya a Noel López.

Solo Chema Rueda votó a favor del 3 por ciento de avales para los candidatos, en consonancia con el mandato precio de la organización socialista granadina y por la decisión del Federal.

Debates y avales

Otra cuestión trascendental separa a los precandidatos: los debates. Chema Rueda es el único que se muestra partidario de celebrar cuantos más debates entre los tres precandidatos, mejor. Tanto Noel López como José Entrena mantienen sus reservas y, en todo caso, solo estarían dispuestos a celebrar alguno cuando se proclamen las candidaturas, el próximo día 20 de septiembre, tras el proceso de recogida de avales, que comenzará el 5 y concluirá el 16 de este mes.

La exigencia del 20 por ciento de avales supone que cada candidato deberá reunir al menos 1.300 avales. Es decir, para que los tres precandidatos lo consigan deben movilizar al 60 por ciento de la militancia socialista, todo un reto

La exigencia del 20 por ciento de avales supone que cada candidato deberá reunir al menos 1.300 avales. Es decir, para que los tres precandidatos lo consigan deben movilizar al 60 por ciento de la militancia socialista, todo un reto.

Y más, si se tiene en cuenta que cada afiliado o afiliada solo puede avalar a un candidato, en un listado en el que debe hacer constar su nombre y DNI.

El hecho de que después del Congreso Provincial se celebren los congresos locales puede influir en la decisión de las agrupaciones que, como es lógico, reclaman para sus municipios mejores prestaciones y servicios a las administraciones, incluida, la Diputación, cuyo presidente es candidato.

En el caso de que Entrena resultara elegido secretario general sería la primera vez en Granada que el máximo cargo orgánico del PSOE lo sea también de la Diputación de Granada, lo que ya pasó con el PP, cuando Sebastián Pérez, presidió la institución provincial en el anterior mandato.

Sí ha ocurrido que un alcalde fuese a su vez secretario general. Como lo fue José Moratalla, regidor de Granada.

La llamada a la militancia

Aunque la llamada a la militancia es el eje de las campañas de los tres precandidatos, solo Chema Rueda lo ha incluido en su lema: La fuerza de la militancia, puede que porque en este periodo en el que recorre agrupaciones presume de haber impulsado actuaciones en la capital para favorecer la participación de afiliados y afialiadas y de simpatizantes, con asambleas abiertas. José Entrena, emplea Motivos para confiar, en un claro guiño continuista, mientras que Noel López ha elegido El Futuro nos une.

El proceso, por primera vez, se disputa también en las redes sociales, con grupo de apoyo a cada uno de los tres precandidatos, que disponen de páginas web, perfiles propios de Facebook y vídeos de presentación, que se mueven por el ciberespacio.

Todo, con tal de convencer a la militancia socialista de la provincia de Granada que tienen ante sí el futuro de la organización.

Nada está decidido de antemano, cuando en última instancia depende del voto secreto.