Lamentan que no han recibido explicaciones y que el gobierno local de Armilla no les ha recibido

Familias del Jean Piaget critican "la negativa del Ayuntamiento de Armilla a autorizar el uso de su piscina municipal" por el alumnado del centro

Ciudadanía - IndeGranada - Lunes, 29 de Enero de 2024
La AMPA del centro, ubicado en Ogíjares, defiende "la visibilización de las personas con discapacidad" y reivindica que sus hijos e hijas "tienen derecho" a disfrutar de ese servicio "como el resto de niños y niñas".

Centro Específico de Educación Especial Jean Piaget, en Ogíjares. agenciaandaluzaeducacion.es

  • "La visibilización de las personas con discapacidad es esencial para favorecer su plena integración en la sociedad y combatir el aislamiento y la segregación, para alcanzar tanto la plena inclusión como la igualdad"

La AMPA Antares del Centro Específico de Educación Especial Jean Piaget de Ogíjares ha expresado su malestar porque el alumnado del centro no podrá utilizar la pisicina municipal de Armilla, "ante la negativa del Ayuntamiento a autorizar su uso". 

Según ha explicado en una nota de prensa, un grupo de "no más de 25 alumnas y alumnos del centro" acude un día a la semana a las instalaciones, una actividad que se viene desarrollando desde hace una década. 

Las familias resaltan los beneficios de esta actividad para el alumnado. Así, enumera que "es un oportunidad para mejorar la autonomía" de los chicos y chicas; dada la cercanía, alumnado puede asistir a pie; y la microgravidez que les proporciona la experiencia de la clase en el agua "les permite mejorar su movilidad" y "aplacar la espasticidad en algunos casos". 

Reproducimos a continuación la nota de la Asociación de Madres y Padres del Alumnado del centro:

Desde la Junta Directiva del AMPA ANTARES del Centro Público Específico de Educación Especial Jean Piaget, nos gustaría comunicar nuestro profundo malestar con el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Armilla. Pese a que la predisposición de este consistorio, para atender las necesidades de nuestro centro, es con frecuencia propicia, este año nos damos de bruces ante a la negativa del Ayuntamiento a autorizar el uso por parte de nuestro alumnado de su piscina municipal, todo ello dentro de un programa de actividades que se viene realizando con éxito desde 2014.

Se trata de un grupo de no más de 25 alumnas y alumnos del centro que durante una década y un día a la semana, hacían uso de dos calles de la piscina del vaso grande así como del vaso pequeño, pensado para fines terapéuticos. 

Desde ANTARES queremos manifestar que no estamos conformes con las explicaciones ofrecidas por el órgano de gobierno. En respuesta a nuestra solicitud, recibimos una notificación en sentido negativo respecto al uso en grupo de las instalaciones de piscina y se nos remite a su vez, una lista de los colegios y asociaciones que durante el año disfrutan de la misma. Los motivos por los que no se aprueba el acceso de nuestro centro, no se han desarrollado por el momento. Hemos intentado reunirnos con la Alcaldesa, pero hasta la fecha no ha sido posible. Tampoco lo hemos podido hacer con la delegada del área de servicios sociales y educación.

Esta actividad es una oportunidad para mejorar la autonomía de chicos y chicas del centro, que trabajan cada día por el pleno desarrollo de su potencial, mejorando al mismo tiempo su autonomía porque la cercanía de la piscina permite al alumnado asistir a pie. Además, la microgravidez que les proporciona la experiencia de la clase en el agua, les permite mejorar su movilidad y también aplacar la espasticidad, en algunos casos. 

Para las madres y padres del CEE Jean Piaget, es ya una evidencia que no pretenden garantizar este servicio a nuestro alumnado. Estamos cansadas de enfrentarnos permanentemente a un techo de cristal que dificulta de forma tanto sistémica como sistemática la plena inclusión de las personas con discapacidad. Y recalcamos, de forma sistémica porque aunque recientemente se haya reformado el art. 49 de la CE, suprimiendo la triste palabra “disminuidos”, los pasos que se dan en este sentido a nivel legislativo son cortos, lentos y tardan en calar en la sociedad, en la vida real. 

La visibilización de las personas con discapacidad es esencial para favorecer su plena integración en la sociedad y combatir el aislamiento y la segregación, para alcanzar tanto la plena inclusión como la igualdad. Nuestros hijos e hijas, diferentes o con necesidades especiales, como quieran ustedes verlo, tienen derecho a ese servicio público tanto como el resto de niños y niñas. Las familias a las que representa ANTARES se sienten en este sentido excluidas y nuestros niños y niños degradados a personas de segunda, una vez más. La realidad del día a día nos sigue recordando que queda mucho trabajo por hacer. 

Es por todo esto que reclamamos una solución".