La capital entra en nivel de "alerta" ante la sequía, aunque sin restricciones a consumo y riego
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha comunicado al Ayuntamiento de Granada que ha activado el nivel de "alerta" ante la situación de sequía, que entraba en vigor el pasado 8 de enero, si bien no ha planteado restricciones para agua de boca, por lo que no se ve afectado el consumo humano "en absoluto", ni para riego de jardines o baldeos.
Así lo ha apuntado este viernes el portavoz del equipo de gobierno municipal de Granada, Jorge Saavedra (PP), quien ha informado este viernes, en una rueda de prensa junto al concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Granada, Enrique Catalina, sobre medidas contra la sequía en la capital granadina.
Este nivel sucede al de "prealerta", que estaba activado desde 2022, y es previo al de "emergencia", que, según ha explicado Saavedra, sí tendría "consecuencias" para los vecinos y la ciudad en su conjunto, donde, en cuanto a medidas de restricción, la situación sigue siendo de "normalidad".
El también primer teniente de alcalde ha especificado asimismo que con el nivel de "alerta" se ha constituido el comité de sequía, compuesto por técnicos de la empresa mixta encargada del suministro, Emasagra, que ya se ha reunido, y al que se sumará el equipo de gobierno local, que ha sido invitado a acudir a sus próximas reuniones.
Se trata no de "alarmar" pero sí de "concienciar" para cuidar del agua en las casas y reducir el consumo humano "al mínimo", en tanto "la situación sigue empeorando" y con las "cuatro gotas" de estos días, como se ha referido gráficamente Saavedra a las últimas lluvias, no se prevé "incidencia real en los pantanos" que abastecen a la capital granadina, cuyos últimos datos de reserva ha dado.
El estado de la reserva de los pantanos que abastecen a la ciudad se sitúa a alrededor de un 30 por ciento por debajo del que presentaban hace un año, de un 76 a un 47 por ciento, este viernes. El de Canales evoluciona del 75 al 46 por ciento, y el de Quéntar, con menos capacidad, del 77 al 52.
El gobierno local defiende que la situación en la capital y el área que abastece a Emasagra es "especialmente buena" en relación a otros territorios de Andalucía
La situación en la capital granadina y el área al que abastece Emasagra es, sea como sea, "especialmente buena" en relación con otros territorios de Andalucía, cuyas medidas y advertencias desde la Junta respalda el Ayuntamiento, ha detallado Saavedra en alusión a que es Sierra Nevada la que abastece en gran medida sus reservas.
Es así una "privilegiada desde el punto de vista del agua" pero la activación del nivel de "emergencia" puede estar próximo, ha indicado el portavoz del equipo de gobierno local, que ha señalado que no dispone de datos aproximativos para precisar cuándo podría darse ese cambio, que corresponde a la CHG, que entraría en ese caso en el comité de sequía constituido.
Ese próximo nivel supondría una petición para la reducción del consumo en la ciudad de "en torno al diez por ciento", lo cual afectaría seguidamente al riego en jardines o baldeos, o a instalaciones como piscinas.
Saavedra ha enfatizado en cualquier caso que el Ayuntamiento y Emasagra se han "adelantado" a esta situación, en tanto ya anunciaron un "ambicioso" plan de resiliencia, que pasa a su vez por una inversión que alcanza en los próximos 15 años los 57 millones de euros.
Tiene un "inicio inminente", y contempla actuaciones tanto en el funcionamiento del ciclo de agua potable y la recogida de la residual para que la red de abastecimiento sea "lo más eficiente posible" con medidas que abundarán principalmente en la reducción de pérdidas y fugas en la red al mínimo.