El Metro de Granada ha disminuido en los últimos cinco años, desde 2018 a 2022, su índice de accidentabilidad en un 64,6%, porcentaje que se obtiene de la comparación en este periodo de la suma de alcances entre trenes y vehículos privados en cruces e intersecciones y la suma de frenadas de urgencia para evitar que se produzca dicha incidencia. De hecho, el pasado año fue el de menor accidentabilidad en toda la serie histórica, incluyendo los apenas tres meses de funcionamiento de este sistema de transporte en 2017 y hasta el 31 de diciembre de 2022, con 18 colisiones y 85 frenadas de urgencias en el pasado año y sin que, en ningún caso, se produjeran daños físicos y materiales reseñables. 

 

 

Según una nota de la Consejería de Fomento,que lo gestiona,en 2018, el Metro de Granada registró 291 incidentes, entre colisiones o alcances en cruces entre los trenes y vehículos privados que invaden la plataforma indebidamente (con señalización semafórica con prioridad para el paso de los trenes), y las frenadas de urgencia, que suponen un sobresalto en el sistema de alarmas y un nivel de desaceleración de la marcha superior al de una frenada ordinaria. Según los últimos datos registrados en 2022, el número de incidentes bajó hasta los 103 (la suma de 18 alcances y 85 frenadas de urgencia), lo que supone una disminución del 64,6%. Donde más se ha notado el descenso ha sido en el número de frenadas de urgencia, que ha pasado de 248 en el año 2018 a 85 frenadas de urgencia en 2022. 

 

Marifrán Carazo, consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, ha indicado que “estos datos reflejan el efecto positivo de las medidas adoptadas para reforzar la seguridad vial en el trazado del metro de Granada, así como la mejor cohabitación entre el propio metropolitano, los coches y peatones, conforme se ha ido consolidando el metro en los municipios por los que discurre”.

 

Analizando las cifras y evolución de la accidentabilidad y seguridad vial en la serie histórica del Metro de Granada, se puede observar cómo se dio una fase crítica durante 2017, con el metro operativo desde 21 de septiembre, y 2018, primer ejercicio anual completo con el metro en explotación comercial,  debido a que se trataba de una etapa inicial de aprendizaje y convivencia entre el metro en superficie y el tráfico motorizado. Desde 2019, el nivel de accidentabilidad disminuye notablemente hasta alcanzar las cifras de hoy día. En concreto, las colisiones desde 2019 descienden a la mitad, con 21 alcances en ese ejercicio, frente a los 43 de 2018, tendencia que se ha ido consolidando en los últimos años, con 22 alcances en 2020; 24 alcances en 2021 y, finalmente, 18 colisiones el pasado 2022.

 

En este sentido, junto al factor de superación de esta primera fase de aprendizaje y convivencia entre el Metro, el tráfico motorizado o el tránsito peatonal, cabe reseñar también las actuaciones llevadas a cabos por la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía para reforzar la seguridad vial a lo largo de su recorrido en superficie. Destaca la actuación que llevó a cabo en 2020 para la mejora y optimización de la seguridad vial del Metro de Granada, y que implicó una intervención en los 67 cruces del trazado con el tráfico rodado e intersecciones con pasos peatonales. 

 

Esta actuación, con una inversión de 813.768 euros, consistió en el reforzamiento de los elementos que dan información a los usuarios de la vía, como las marcas viales en la calzada, las señales verticales y los semáforos, entre otras acciones, para la mejora de la visibilidad en los cruces (poda de árboles y vegetación en glorietas), además de implantar más elementos de protección, como barandillas metálicas.

 

El análisis de la accidentabilidad del Metro de Granada sirve a la Agencia de Obra Pública para mejorar sus protocolos de seguridad y el plan de autoprotección del metro, así como su implementación a través de la comisión de seguridad del metro de Granada, que planifica también los ejercicios de simulacros de emergencias. 

 

El apartado de mejoras del servicio del Metro de Granada y nuevos contratos de mantenimiento se ha traducido en la contratación, ejecución o licitación, desde enero de 2019 hasta enero de 2023, de actuaciones por importe de 146,8 millones de euros. Si a este importe sumamos también las actuaciones compensatorias por las obras del Metro de Granada y los proyectos y obras para su ampliación, el volumen de inversión asciende a 203,7 millones de euros.