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'Todos somos clase media'

Blog - El ojo distraído - Jesús Toral - Viernes, 23 de Septiembre de 2022
Jóvenes pasean por la calle Mesones, de la capital granadina.
M.R.
Jóvenes pasean por la calle Mesones, de la capital granadina.

Nos hemos acostumbrado a vernos separados del resto del mundo pero al mismo tiempo pertenecientes al mismo grupo, sin destacar por arriba ni por abajo. En la última encuesta del barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas se pone de manifiesto que casi un 70% de la población española se considera incluida dentro de la clase media, pese a que el 24% de ellos declaraba unos ingresos netos mensuales que oscilaban entre los 1.200 y los 1.800 euros, un 14% reconocía salarios de entre 1.800 y 2.400 y el 19% señalaba ingresos de entre 900 y 1.200 euros. Lo cierto es que la clase media engloba a los hogares con ingresos netos entre el 75 y el 200% de la renta mediana nacional, que no es lo mismo que la renta media. Si bien, estos porcentajes no concitan el acuerdo generalizado de todos los profesionales, ya que los sociólogos consideran que es necesario tener en cuenta también el sector laboral y no solo la cifra salarial para establecer la clase social.

No es raro, por tanto, que ante tal desacuerdo, la mayoría de la población actual española tome la iniciativa y se identifique con el grupo que mejor le hace sentir que, en este caso, es la clase media, por encima de la obrera, la  pobre o la clase alta

No es raro, por tanto, que ante tal desacuerdo, la mayoría de la población actual española tome la iniciativa y se identifique con el grupo que mejor le hace sentir que, en este caso, es la clase media, por encima de la obrera, la  pobre o la clase alta. Al contrario que en la época de nuestros padres o abuelos, cuando la gente se sentía parte de la clase trabajadora y no tenía ningún problema en proclamarlo, hoy en día tratamos de desvincularnos de esa imagen, tal y como explicaba Owen Jones en su libro «Chavs: la demonización de la clase obrera: todos somos gente de clase media», donde el autor concluye que la clase trabajadora ha pasado de ser «la sal de la tierra» a la «escoria de la tierra».

Por eso, es comprensible que en las encuestas los participantes pongan énfasis en hablar de las dificultades económicas que atraviesa el país, pero después pocos reconocen que ellos también se ven afectados directamente. Y si no, que se lo digan a las distintas entidades de ayuda social que ya han alertado de la situación, tras la fuerte inflación que llevará a Cáritas a gastar  un 10% más en ayudar a la misma cantidad de gente que en 2021, mientras que Cruz Roja ha avanzado que a finales de año se verá obligada a atender a 400.000 personas más que antes de la pandemia.

De alguna manera, esto viene a incidir en el hecho de que vivimos en una sociedad que premia el dinero y castiga la pobreza, como si el respeto estuviera ligado a la economía o la calidad humana fuera inherente a la abundancia monetaria

No es verdad que el 70% de la población forme parte de la clase media en un momento en el que la inflación está incidiendo de manera específica en el bolsillo de todos los españoles, pero sí es cierto que ser de clase obrera hoy en día se considera marginal, y por ello es comprensible que incluso los estudiantes universitarios sin ingresos económicos se auto incluyan en dicha clase, heredada de los padres.

De alguna manera, esto viene a incidir en el hecho de que vivimos en una sociedad que premia el dinero y castiga la pobreza, como si el respeto estuviera ligado a la economía o la calidad humana fuera inherente a la abundancia monetaria.

Nadie puede negar que Juan Carlos pertenezca a la clase más altísima de todas las clases altas que haya en el país igual que forma parte de la peor catadura moral

Es cierto que la economía establece leyes para dividir a la población en clases sociales, pero no tiene ningún sentido que el valor de un ser humano tenga absolutamente nada que ver con el dinero que gane. Si no, que se lo digan a ese personaje que todavía algunos en este país siguen adorando y que continúa teniendo un hueco entre las monarquías de rancio abolengo europeas que le invitan a sus ceremonias pese a reconocer que durante su reinado tuvo sombras oscuras que han ennegrecido las luces. Nadie puede negar que Juan Carlos pertenezca a la clase más altísima de todas las clases altas que haya en el país igual que forma parte de la peor catadura moral.

Los mayores logros en la sociedad industrial se consiguieron gracias a las luchas de la clase trabajadora, porque estaban orgullosos de sí mismos y querían prosperar

De boquilla todos somos conscientes de que hay profesionales con bajos salarios y los más altos valores sociales y al contrario, pero a la hora de identificarnos, la mayoría seguimos prefiriendo ser incluidos dentro del grupo del ex rey que en el de los trabajadores más pobres y esto que parece una anécdota es una forma sutil de manipulación de las masas, porque mientras uno sienta que está dentro de la media, aunque no lo esté, se conformará sabiendo que hay otros por debajo de él y no tendrá inconveniente en arremeter contra ellos para distanciarse de su imagen, pese a que en realidad sea muy parecida a la nuestra.

Los mayores logros en la sociedad industrial se consiguieron gracias a las luchas de la clase trabajadora, porque estaban orgullosos de sí mismos y querían prosperar. Hoy en día, nos estamos acostumbrando a quejarnos en silencio de las cosas para que nadie nos señale y no acaben quitándonos lo poco que tenemos. Estamos en una sociedad que prefiere batallar por las migajas sin destacar en exceso para que le permitan mantenerse dentro del grupo, aunque este sistema no contribuya a la mejoría de la calidad de vida del conjunto de la población sino de los más privilegiados, que aprovechar para esconderse detrás de la masa con el fin de manipularla con impunidad.

 

 

 

 

Imagen de Jesús Toral

Nací en Ordizia (Guipúzcoa) porque allí emigraron mis padres desde Andalucía y después de colaborar con periódicos, radios y agencias vascas, me marché a la aventura, a Madrid. Estuve vinculado a revistas de informática y economía antes de aceptar el reto de ser redactor de informativos de Telecinco Granada. Pasé por Tesis y La Odisea del voluntariado, en Canal 2 Andalucía, volví a la capital de la Alhambra para trabajar en Mira Televisión, antes de regresar a Canal Sur Televisión (Andalucía Directo, Tiene arreglo, La Mañana tiene arreglo y A Diario).