La sanidad pública andaluza no sale de la UCI
No hay un día en el que usuarios, sindicatos, -en representación de profesionales-, o partidos, -recogiendo el sufrimiento generalizado de la población que la padece-, no trasladen su descontento por el servicio que presta la sanidad pública andaluza, agravada durante el verano por la carencia de profesionales sanitarios, sobre todo médicos, en una lamentable falta de previsión, que merma la Atención Primaria y cierra camas y unidades en hospitales.
La mejora sustancial de de la sanidad pública es hoy el gran reto del nuevo gobierno andaluz, con mayoría absoluta del PP, que en la pasada legislatura apostó por incrementar la privatización de la sanidad, con grandes sumas destinadas a enriquecerla, en lugar de mejorar directamente el servicio público, piedra angular del estado de bienestar
La mejora sustancial de de la sanidad pública es hoy el gran reto del nuevo gobierno andaluz, con mayoría absoluta del PP, que en la pasada legislatura apostó por incrementar la privatización de la sanidad, con grandes sumas destinadas a enriquecerla, en lugar de mejorar directamente el servicio público, piedra angular del estado de bienestar.
El gobierno de Moreno ha batido el récord en derivaciones a la sanidad privada y, por tanto, de capital público, destinado a privada, un sector que no para de crecer en Andalucía. (Según los datos de la Unión Española de Entidades Aseguradoras (Unespa) en 2021 Andalucía cerró con 1.750.321 asegurados con prestación de servicios sanitarios, lo que representaba 98.754 más que el año anterior, el mayor incremento de la última década).
Los últimos datos del SAS disponibles revelan que en 2021 destinó 201 millones de euros, casi el doble que en el ejercicio precedente, a la privada y sin que el Covid fuera excusa puesto que tan solo 20 pacientes de los 858.529 derivados al año pasado a clínicas privadas padecían el coronavirus.
En 2021 destinó 201 millones de euros, casi el doble que en el ejercicio precedente, a la privada y sin que el Covid fuera excusa puesto que tan solo 20 pacientes de los 858.529 derivados al año pasado a clínicas privadas padecían el coronavirus
Después de tres años negando la evidencia y sacando pecho por la gestión sanitaria, la derecha se quita al fin la careta y afronta la realidad de una situación crítica. Para empezar, Juan Manuel Moreno destituye al que fuera consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, y para evitar asumir el fracaso de una gestión penosa le nombra presidente del Parlamento andaluz, una salida honrosa.
Luego, en el discurso de investidura, Moreno se compromete a que los andaluces sean atendidos por su médico en “un máximo de 48 horas de media”, un plazo del que presumió ya en el anterior mandato, a pesar de que la demora, con una aplicación caótica, como Salud Responde, alcanzaba como mínimo las dos semanas.
Y más: Garantiza que el nuevo Gobierno andaluz abordará los problemas que persisten en la Atención Primaria” y anuncia “una reforma integral” para "modernizar y agilizar el modelo de Atención Primaria, ya que la solución no puede ser volver a la precaria situación pre-Covid, con centros de salud masificados y consultas que apenas llegaban a cinco minutos por paciente".
Moreno y Aguirre, en una imagen de la anterior legislatura. Junta
De esta forma, reconocía, sin asumir autocrítica, al estilo de Moreno, la precaria situación de la sanidad, a la que seguía culpando de la responsabilidad a los anteriores gobiernos y a la pandemia.
De esta forma, reconocía, sin asumir autocrítica, al estilo de Moreno, la precaria situación de la sanidad, a la que seguía culpando de la responsabilidad a los anteriores gobiernos y a la pandemia
Pese a todo, Moreno aseguró que la sanidad andaluza "se ha modernizado y ha experimentado un salto de calidad que llevaba años esperando". Nada más lejos de la realidad, como así insisten en municipios de la provincia.
En el grandilocuente acto de toma de posesión como presidente de la Junta por segunda vez, en esta ocasión, con mayoría absoluta, aludió al liderazgo de Andalucía que, en su opinión, suponía, entre otras consecuciones, “tener una sanidad moderna y de calidad”.
La promesa electoral de Moreno de ofrecer gratis televisión y wifi en los hospitales, como medida estrella para la sanidad pública, después de despedir a 8.000 profesionales sanitarios, deja en evidencia la apuesta de la derecha por un maltrecho sistema sanitario andaluz que empeora.
‘Velatorio’ por la muerte de la sanidad pública
Pero mientras Moreno preparaba su pomposa investidura, desde el inicio del verano se volvía a hacer visibles los problemas de la sanidad pública andaluza. El plan de vacaciones del SAS solo preveía cubrir al 30 por ciento del personal sanitario. Lo denunciaba el sindicato de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO Granada, que se quejaba de la falta de transparencia de la Junta en revelar los cierres de camas, actividad asistencial y sustituciones -lo hace “tarde y mal”-, según el secretario general de CCOO Sanidad Granada, Félix Alonso.
En los centros de salud, la población sufre las demoras y la atención deficitaria al haber sobrecarga de trabajo y menos profesionales
En el distrito Granada-Metropolitano cerrarán hasta septiembre las consultas de tardes y consultorios periféricos por la falta de profesionales. Y en los centros de salud, la población sufre las demoras y la atención deficitaria al haber sobrecarga de trabajo y menos profesionales, estimaba el sindicato.
Debido a la falta de personal, CCOO constató que todas las gerencias, tanto de hospitales como de atención primaria, están utilizando profesionales sin título homologado de medicina en la UE, aunque con capacidad contrastada. Y en el caso del sector de la enfermería, la falta de profesionales es para CCOO inaceptable. Por todo ello exige a la administración que agilice los procesos de homologación para dar seguridad, estabilidad y protección laboral a los profesionales.
La Junta no cubre las bajas por vacaciones, pero tampoco las que se producen por Covid. El Sindicato de Enfermería Satse en Andalucía alertó de un nuevo incremento de contagios por Covid-19 entre profesionales de la sanidad andaluza en el inicio del verano, en el que se han registrado 3.203 positivos, y reclamó al Gobierno andaluz que adopte "las medidas necesarias que garanticen que se cubra el cien por cien de las bajas que se generen por estos contagios".
En un municipio de la Costa, ante el cuadro que presentaban una persona mayor, llamaron a la teleasistencia que, inmediatamente, le pasaron con el 061. Tras comentar los detalles -las patologías que ya sufría y los vómitos y mareos que provocaron la llamada-, le espetaron: “Usted por qué llama”. La atención se demoró cuatro horas, hasta que sobre las dos de la madrugada llegaron al domicilio.
IU protagonizó una concentración esta semana a las puertas de la Delegación de Salud para denunciar "el deterioro y el caos sanitario" en la Atención Primaria y en los hospitales de toda la provincia, "que se agrava con el repunte del Covid y el aumento de la afluencia de visitantes durante vacaciones". Participaron ediles, alcaldes y representantes provinciales de la formación.
Alcaldes y concejales de IU, junto a la diputada provincial y coordinadora, María del Carmen Pérez, en la concentración ante la Delegación de Salud. IU
La coordinadora provincial de IU Granada, Mari Carmen Pérez, junto a concejales denunció en aquel acto la situación de "caos sociosanitario" a la que se enfrentan las vecinas y vecinos de Granada. Y anunció mociones a los ayuntamientos y a Diputación de Granada "para sumar esfuerzos y seguir luchando para frenar la privatización de nuestra sanidad, que se evidencia en la falta de personal sanitario, cierre de Centros de Salud y deterioro de los servicios en las zonas rurales". Según advirtió a la Junta que "no podemos consentir que haya centros de salud cerrados en las zonas rurales".
"Seguiremos reivindicando nuestra sanidad pública sumando propuestas y explicando la situación de privatización a la que nos enfrentamos para conseguir frenarla”
"Seguiremos reivindicando nuestra sanidad pública sumando propuestas y explicando la situación de privatización a la que nos enfrentamos para conseguir frenarla”. Para ello, han anunciado que "seguiremos diseñando propuestas para conseguir proteger nuestro Sistema de Salud Público en todos los rincones de la provincia".
Desde el PSOE, la parlamentaria andaluza María Ángeles Prieto valoró esta semana que esta “forma indolente” de gestionar la sanidad pública por parte del PP ha generado un “caos asistencial y organizativo también en los demás centros de salud de la provincia, donde no se han producido las contrataciones necesarias para llevar a cabo las sustituciones de verano para que las y los profesionales puedan cogerse vacaciones sin la sobrecarga de trabajo que les supone sustituir a los compañeros”.
Además, en muchos centros se han cerrado consultas y disminuido el número de trabajadores por lo que es evidente que no se presta la asistencia sanitaria que la población necesita ni se tiene en cuenta en enorme esfuerzo que realiza todo el personal sanitario.
El incremento de las demoras en atención primaria y la eliminación de las urgencias en muchas zonas rurales son otros problemas que actualmente existen en la provincia debido a la dejadez de la Junta que continúa su hoja de ruta de desmantelamiento de la sanidad pública
El incremento de las demoras en atención primaria y la eliminación de las urgencias en muchas zonas rurales son otros problemas que actualmente existen en la provincia debido a la dejadez de la Junta que continúa su hoja de ruta de desmantelamiento de la sanidad pública, ha resumido.
La diputada socialista se solidarizaba en nombre del PSOE con la movilización en Fuente Vaqueros, en el que un centenar de vecinos y vecinas, con el alcalde, José Manuel Molino, a la cabeza, se encerró toda la jornada del pasado viernes en el centro de salud para protestar por la falta de personal médico.
En apenas 24 horas, el Ayuntamiento de Fuente Vaqueros recogió medio millar de para pedir a la Junta de Andalucía que respete la ratio de personal sanitario que le corresponde al municipio.
Es la última de momento, pero habrá más.
La sanidad pública andaluza no puede esperar más.
El viernes 15 de julio, dos hermanos fueron atropellados en un paso de cebra en una calle de Loja, a escasos mil metros del Hospital, (Hospital de Alta Resolución). Según testimonios recabados por testigos presenciales, la ambulancia del 112 tardó en llegar 40 minutos. No había ni personal ni medios que pudiera salir del centro hospitalario y recorrer ese kilómetro para atenderlos, a pesar de que fueron requeridos, entre ellos, la propia Policía Local y el padre de los dos hermanos heridos. Se vivieron momentos muy tensos.
Desde el Hospital Clínico San Cecilio, del que depende el centro de Loja, informaron sin embargo que “la activación al 061 se realizó desde las Urgencias del Hospital de Loja, cuando el familiar acude con intención de que los profesionales se desplacen hasta el lugar del accidente, a más de un kilómetro de distancia del centro hospitalario”.
Y aclaran: “Si el accidente se hubiera producido en la puerta del hospital o en un radio de escasos metros, en el que existiese contacto visual con lo sucedido, los profesionales hubieran podido acercarse, a pie, hasta el lugar del accidente. Sin embargo, en circunstancias en las que no existe riesgo para la vida del paciente, y la distancia es suficiente, hay que activar otro recurso que traslade al paciente al hospital”.
Añaden que “los dos pacientes heridos leves en el atropello fueron finalmente atendido en las Urgencias del Clínico San Cecilio, a donde se trasladaron para realizarles pruebas y descartar lesiones internas, recibiendo ambos el alta hospitalaria, en un caso minutos, y en otro horas después”.
El PSOE de Loja advirtió de que “el deterioro de la sanidad pública es patente y evidente, en nuestra ciudad y en nuestra comarca. No se ha invertido y no hay intención real de remediar la situación de falta de profesiones, servicios y renovación de instalaciones".
“En los últimos años vemos como la idea de un servicio de salud público de calidad está cayendo en picado. Andalucía y por lo tanto Loja, está a la cola de la inversión y gasto por habitante en España y desde la Junta de Andalucía solo se hacen promesas repetidas, que o no se cumplen o se quedan a medias”. “El alcalde y el Partido Popular, que tanto clamaban, protestaban y salían a reclamar más servicios sanitarios, ahora callan y miran a otro lado ante el mal funcionamiento, las interminables listas de espera o el retraso de más de dos semanas en la atención primaria. No es que estemos igual, es que estamos claramente peor”.
“Además de todo esto, la falta de recursos y de personal, hace que nuestro personal sanitario, el mismo que hace poco ponía en riesgo su vida ante la pandemia de Covid, el que nos atiende y cuida día a día, siga soportando una carga de trabajo, de responsabilidades y de estrés cada vez mayor”.
“Y así, los recortes en sanidad nos afectan en situaciones cotidianas y también en las extraordinarias, como ocurrió cuando para atender un accidente, los heridos tuvieron que esperar a que la ambulancia viniera de Granada, porque en el Hospital de Loja no había en ese momento”.
“No queremos que esta situación de precariedad acabe siendo la normalidad, que nos conformemos con lo que nos están dando. Necesitamos que los planes de inversión, modernización y adquisición de servicios se pongan en marcha. Que no se cierren servicios con la excusa de la despoblación ni del verano. Queremos una sanidad pública de calidad, para todos y para todas”.
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