Sierra Nevada, Ahora y siempre.
Contra las políticas que cierran fronteras y elevan muros

La Red Granadina por el Refugio y la Acogida alza la voz para reclamar 'paz con justicia social'

Implicados - IndeGranada - Sábado, 3 de Febrero de 2018
Con una concentración en la Fuente de las Batallas, los representantes de los colectivos que integran la red han recordado que la paz no supone únicamente la ausencia de conflictos armados, también implica una sociedad donde impere la justicia y el respeto a los derechos humanos.
Representación para denunciar el cierre de las fronteras.
IndeGranada
Representación para denunciar el cierre de las fronteras.

En la Fuente de las Batallas, con carteles en los que se podía leer que el asilo es un derecho humano y que denunciaban que el Mediterráneo se ha convertido en "una tumba", los integrantes de la Red Granadina por el Refugio y la Acogida han vuelto a alzar la voz contra las políticas migratorias que cierran fronteras y elevan muros.

Antes de comenzar el sencillo acto, en el que se ha leído un poema de Ángel González y llevado a cabo una representación para llamar la situación sobre el drama de las personas refugiadas, un portavoz de la RedGra ha recordado que en las últimas horas una barcaza con más de 300 personas ha naufragado frente a las costas de Libia. "Eso nos empuja una y otra vez a salir y alzar la voz contra las políticas europeas que facilitan estos hechos tan tristes", ha afirmado para recordar que más de dos años después de que el Gobierno español se comprometiera a acoger a 17.000 personas refugiadas, no han llegado ni 2.000.

El acto ha finalizado con la lectura de un comunicado reivindicando un trato digno y el respeto a los derechos fundamentales de las personas. 

La concentración se ha desarrollado con el lema “Paz, Acogida y Derechos Humanos”, que se podía leer en la pancarta que ha presidido el acto. 

La Red Granadina por el Refugio y la Acogida no ha olvidado recientes acontecimientos que "atentan contra el trato digno y el respeto de los derechos fundamentales, desprotegiendo y criminalizando a las personas más vulnerables", como: 

  • "El encierro ilegal de más de 500 personas recién llegadas a nuestras costas en la cárcel de Archidona, que viola incluso el propio Reglamento de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE). Entre las personas encerradas había menores de edad, y las pésimas condiciones de alojamiento y las deficiencias en la atención provocaron varias revueltas. La falta de transparencia por parte del gobierno ha sido absoluta, hasta el punto de que se ha archivado la investigación sobre una muerte ocurrida en su interior, el supuesto suicidio de uno de los hombres que participó en una protesta".
  • "El abandono en la estación de autobuses de Granada de decenas de inmigrantes que habían llegado por vía marítima a las ciudades costeras de Motril y Almería. El hecho tuvo lugar el pasado 16 de diciembre y fue una muestra clara de la situación de indefensión en que se encuentran las personas que, sin información ni medios para subsistir, quedan en pleno invierno en situación de calle. Sólo una veintena encontró refugio en la casa de los Padres Combonianos, que han asumido la labor de atenderlos adecuadamente y de cubrir sus necesidades".
  • "Las continuas muertes de personas en el Mar Mediterráneo. Sólo durante el mes de enero se ha contabilizado 213 personas fallecidas, 28 de las cuales se ahogaron en la ruta hacia España. A ello hay que añadirle que 7 personas murieron también frente a la costa de Lanzarote el pasado 15 de enero".
  • "La criminalización de la asistencia humanitaria y de la defensa de los Derechos Humanos. Helena Maleno, activista radicada en Tánger, está a la espera del fallo judicial tras haber sido acusada en Marruecos de fomentar el tráfico de seres humanos. Consideramos que es sumamente grave la criminalización de una mujer que ha ayudado a salvar miles de vidas y realiza una importante labor de denuncia ante las constantes violaciones a los Derechos Humanos en la Frontera Sur".

Estas situaciones son, han denunciado, "consecuencia de una política migratoria represiva, que obliga a miles de personas a jugarse la vida para tratar en encontrar un futuro en condiciones más dignas. Por ello, exigimos una vez más que se creen vías alternativas para migrar de forma segura, para que aquellas personas que se han visto obligadas a abandonar sus hogares encuentren esa 'paz con justicia' que reivindicamos".