Alberto Matarán, secretario general de Podemos en la capital, ha denunciado en el Día Mundial del Turismo que "Granada está comenzando a sufrir ya el crecimiento exponencial de una nueva burbuja, la del turismo; cuando todavía no se ha recuperado del pinchazo de la burbuja inmobiliaria".

"Esta nueva burbuja está incidiendo directamente en el incremento del precio de la vivienda y aunque los gobernantes no quieran darse por enterados, en una ciudad turística como Granada la nueva burbuja está siendo inflada con fuerza por la proliferación de alquileres turísticos primero en el centro y ahora también en las zonas aledañas y en el resto de barrios. Sólo el portal Airbnb ha registrado a lo largo de 2017 una subida de más del 30 por ciento hasta alcanzar casi 3000 alojamientos en la actualidad. Esta cantidad supone en este momento alrededor del 3% del total de viviendas de la ciudad, pero como se puede ver en el mapa adjunto obtenido del portal AirDna.co , en el centro y las zonas aledañas se concentra en este momento la mayor parte de la oferta suponiendo una presión importante en estos barrios y por lo tanto en el conjunto de la ciudad", ha explicado.

Para Matarán, esto supone que quienes pretenden comprar o alquilar una vivienda en estos meses "se están topando con esta realidad que amenaza con vaciar esta ciudad desplazando a la población cada vez más lejos".

Su propuesta consiste por una parte en abordar "con urgencia" la regulación, "incluyendo el cobro de tasas e impuestos", y la limitación de los apartamentos turísticos -definiendo un número máximo que disminuya la masificación en la zona central y evite que sea excesivo en el resto de barrios-, junto con la recuperación urgente de las políticas de vivienda pública de alquiler "que podrían mejorar su financiación entre otros con los impuestos que debería pagar el turismo"; la protección del comercio tradicional y de barrio, evitando la proliferación de comercios exclusivamente dedicados al turismo, "por ejemplo mediante la definición de los límites para cada tipología comerciales en cada zona de la ciudad". Respecto al empleo, considera que el sector de la hostelería tiene que ver el turismo como "una forma de generar riqueza para toda la ciudad de Granada, eso incluye por supuesto a los trabajadores, cuyas condiciones no han sido buenas en los últimos años y necesitan una mejora; y en ese contexto se apuesta por un acuerdo en el convenio que afecta a alrededor de 14.000 trabajadores y trabajadoras". 

El secretario general de Podemos Granada condena los actos vandálicos en nombre del ataque al turismo, "creemos que se tratan de hechos aislados que ocurren con cualquier tema pero realmente nos preocupa mucho la situación” y defiende, "si tenemos unos barrios bien habitados, los turistas se verán bien recibidos"y para esto, el gobierno municipal "debe controlar los ruidos y las actividades de ocio en las zonas saturadas". "Proponemos que limiten la cantidad de terrazas al tiempo que controlan la ocupación de la vía pública, principalmente en las zonas saturadas".

Las propuestas de la formación morada implican "avanzar en la aprobación del Plan Especial Albaicín para responder a la realidad de la masificación turística, al tiempo que se revisan tanto el PGOU como el resto de documentos de planificación que pueden responder al desafío de la burbuja turística y exigir que el gobierno del estado modifique la Ley de Arrendamientos Urbanos y que la Junta de Andalucía aborde estos problemas en lugar de dejarlos únicamente en manos de los ayuntamientos". Además, en el caso particular de Granada, "es fundamental tratar esta cuestiones de forma coordinada en el conjunto de municipios del área metropolitana para que los beneficios del turismo puedan llegar a todos lados y para evitar al mismo tiempo los problemas del descontrol y la masificación".