Valderrubio recupera nuevos objetos pertenecientes a la familia García Lorca

Cultura - Europa Press - Miércoles, 24 de Junio de 2020
El juego de jarra y vasos luce ya en la cocina de la casa de Valderrubio.
Ayto. Valderrubio
El juego de jarra y vasos luce ya en la cocina de la casa de Valderrubio.

La Casa Museo Federico García Lorca de Valderrubio ha recuperado objetos originales que pertenecieron a la familia del poeta, concretamente un juego de jarra con cuatro vasos de cristal fino rojo que la hermana de Federico regaló a una familia del pueblo, cuyos descendientes lo han cedido.

Ha sido una vecina de Valderrubio, Consuelo Ruiz Rodríguez, quien ha querido que el regalo que Concha García Lorca, hermana del poeta, hizo a su madre en el día de su boda vuelva a la actual casa museo.

Esta familia vivía frente a la casa de los García Lorca en la calle Iglesia y cosían para ellos. Por ese motivo, la madre de esta vecina se hizo amiga de Concha García Lorca.

Consuelo cuenta que Federico, cuando iba al colegio, solía repartir casi todo lo que llevaba en su maletín, incluso la ropa, entre sus compañeros. "A veces volvía hasta sin zapatos", afirma entre risas.

Otra de las anécdotas que contó su madre a Consuelo acontece en los paseos del poeta al río Cubillas, que inspiraron sus primeros versos. "Se fue Federico un día al río y volvió con los calzones rotos. Él iba a escribir allí. Al entrar por el pueblo se rieron de él. Doña Vicenta pensó mandarle todos los días una silla chica para que no estuviera sentado en el suelo. Le daba a mi tío algo de merienda y mi tío iba volado a llevarle la silla a Federico".

Cuando la familia García Lorca se marcha de Valderrubio, rememora Consuelo, "venían de visita la señorita Concha e Isabelita" (como las llama ella), a la casa de los caseros en la que por aquel entonces vivía Juan Mata. Al marcharse de España muchos de los objetos se repartieron entre familiares y amigos.

Otros, como este juego de jarra que ahora podremos contemplar, se quedaron en las manos de vecinos de la localidad que los han guardado durante años. La familia de Consuelo tuvo un comprador interesado hace años, justo cuando atravesaban un mal momento económico, que les ofreció 15.000 pesetas. Sin embargo, por el valor sentimental y significado que tenía para ellos, no quisieron desprenderse de él.