El festival Sun and Snow llega este fin de semana a Sierra Nevada con su quinta edición, la "más ambiciosa" de la cita de música electrónica celebrada a mayor altitud del Sur de Europa, con cuatro escenarios distribuidos por la estación invernal granadina, desde Pradollano a Borreguiles, donde se sucederán más de 30 actuaciones musicales.

El escenario principal está localizado, como en la edición anterior, en el parking de Los Peñones, en la zona alta de la urbanización, donde se sucederán el viernes y sábado las sesiones musicales en dos emplazamientos: The Mountain Club, bajo una enorme carpa cubierta y calefactada, y el Igloo Stage justo en la entrada del recinto principal

El escenario principal está localizado, como en la edición anterior, en el parking de Los Peñones, en la zona alta de la urbanización, donde se sucederán el viernes y sábado las sesiones musicales en dos emplazamientos: The Mountain Club, bajo una enorme carpa cubierta y calefactada, y el Igloo Stage justo en la entrada del recinto principal.

Los otros dos escenarios estarán en la plaza de Andalucía de Pradollano, The Housy Van, y en Borreguiles (Altitude Stage) en la terreza Chill Out. En este último, a 2.700 metros de altitud, las sesiones musicales se desarrollarán desde las 11,00 horas el sábado y el domingo, mientras que en la Housiy Van, de Pradollano, habrá venta de tiques y música tanto el viernes como el sábado.

Nombres como Skatman, Mala Ika, Dj Holographic, Jimi Jules B2B Trikk o Krystal Klear serán protagonistas la primera jornada del festival, mientras que Curses Hybrid Set, Orbe, Way of Thinking, Or:la, Hunee, John Talabot o Leafar Legov, destacan en la segunda jornada, la que cuenta con mayor número de actuaciones en la programación del festival.

El domingo 7 de abril el festival se despide con sesiones como Paramida o Musumeci, un set B2B de Rober Peinado y Gabi o la actuación en directo de Odille Lima.

La quinta edición del Sun and Snow se consolida como una propuesta de música electrónica con las pistas de Sierra Nevada como escenario que se integra en los espacios de la estación de una manera totalmente respetuosa con el entorno. Tres jornadas de electrónica en un paraje natural de excepción y en un ambiente festivo, pero de festival boutique, que también supondrán el fin de la temporada de esquí, al ritmo de sonido club.