El Ayuntamiento de Granada ha arrancado este lunes la serie de comparecencias públicas a cargo de representantes institucionales y personalidades de reconocido prestigio del mundo de la cultura para la elaboración del Plan Estratégico que servirá de hoja de ruta para el proyecto de la Capitalidad Europea de la Cultura 2031. La primera ponente en comparecer en esta comisión especial presidida por el alcalde de Granada, Luis Salvador, ha sido la rectora de la Universidad de Granada (UGR), Pilar Aranda, quien ha resaltado en su intervención la necesidad de establecer una “nueva dimensión” en la relación entre ciudad y universidad, estableciéndose así una realidad a la que ha denominado “Universidad ciudadana”.

“Tenemos que trabajar ya en el concepto de Universidad del siglo XXI. El futuro de la universidad pasa por sumar a las funciones tradicionales de generación y transmisión del conocimiento, la de proyectar socialmente su actividad más allá del ámbito económico, tecnológico, cultural o divulgativo”, ha señalado Pilar Aranda, quien ha recordado que en 2031 la Universidad de Granada conmemora también el V Centenario de su constitución.

En esta línea, Luis Salvador ha valorado que el horizonte de 2031 en el que confluyen ambos hitos es “una oportunidad única para repensar la ciudad”, algo para lo que considera esencial la “búsqueda de consensos para la toma de decisiones” y la “coordinación entre administraciones”. “La ciudad no es solo Granada capital, sino también su área metropolitana y el resto de la provincia. Está en la mano de todos conseguir un proyecto de ciudad accesible, integrador, sostenible y para las personas”, ha aseverado el alcalde, quien ha insistido en la necesidad de llegar a esa fecha “con todos los deberes hechos”. 

En esa nueva relación Universidad-Ciudad, la rectora ha detallado la doble perspectiva en la que se integran ambos conceptos, y que estaría fundamentada tanto en la relación con el entorno; es decir, con un modelo de universidad urbana con presencia diseminada por toda la ciudad y una sede múltiple en diversos puntos; como en la relación de ingresos y retornos, reclamando el papel de la UGR como “motor económico y social de la ciudad y la provincia” pero sin olvidar tampoco de los efectos colaterales que tiene la presencia universitaria en la ciudad. “¿Cuánto debe la universidad a la ciudad y cuánto debe la ciudad a la universidad?”, ha planteado Aranda.

La rectora también ha incidido en el “fuerte compromiso social” que ha de tener la universidad para la ciudad y para un proyecto como el de la Capitalidad Europea de la Cultura 2031 entendiéndola como “un bien público al servicio de la sociedad”. “El reverso de la autonomía universitaria es nuestra responsabilidad social. En este sentido, la Universidad debe hacerse presente en la ciudad, poniendo lo mejor de sí misma al servicio de sus necesidades y transfiriendo conocimiento para la resolución de los problemas más acuciantes de su entorno más próximo”, ha apostillado Aranda, quien ha incidido en que la Universidad solo puede entenderse como servicio público y como garante de la igualdad y del bienestar de los ciudadanos, de la salud, la educación, la inclusión o la diversidad, asumiendo en todo momento “una necesaria función de liderazgo social”. 

Junto a esto, Pilar Aranda ha subrayado la “esencial apuesta por la investigación” en la sociedad del conocimiento, integrando todas las áreas y enfatizando el “papel trascendental” que desempeñan las universidades en la garantía del derecho de acceso en igualdad de condiciones a la riqueza que representa el conocimiento.

El alcalde ha agradecido a la rectora su “brillante aportación” para el desarrollo de uno de los proyectos de futuro capitales para Granada, basado en reconocer el importante peso de la cultura que ya es una realidad en la ciudad y reforzarlo con aquellas iniciativas y equipamientos necesarios para su completo desarrollo.

A la comparecencia de la rectora han asistido, además del equipo técnico que coordina la redacción del plan estratégico, el delegado de Cultura de la Junta de Andalucía, Antonio Granados; el jefe de servicio de Cultura de la Junta de Andalucía, Enrique Moratalla; los vicerrectores de la UGR Pedro Mercado y Víctor Medina, así como representantes de instituciones como la Real Academia de Medicina y el Ateneo de Granada y representantes de los grupos municipales del Ayuntamiento de Granada.