J.J. Machuca: "Mis dos profesiones y pasiones son el piano y los sintetizadores"
Así presentan en la plataforma Filmin ese trabajo audiovisual de Machuca, que va de lo micro a los macro y hasta las alucinógenas inmensidades celestes. Un festín para los amigos de las músicas ambient y planeadoras. Se puede ver online, pero la experiencia ya es total si él lo toca en directo en persona, como sucederá en el Centro García Lorca este 24 de febrero (20:00h).
─ ¿Qué música prefieren los mundos para danzar: reguetón, trap, rock, boleros…?
─ En el caso de “La danza de los mundos”, al ser piano solo, opté por hacer la mayoría de las obras en compases ternarios, que dan más juego a la danza. No obstante hay algunos momentos en el directo donde uso el piano para crear bases rítmicas y looperlas para crear ciertos ritmos como hiphop o una bulería…
─ Ha hecho muchos trabajos de este tipo, teatro, publicidad etc ¿Qué le llamó la atención de estas imágenes para trabajar sobre ellas? ¿O fue al contrario, primero la música y luego la parte visual?
─ Primero tenía un esquema con la temática de cada capítulo y compuse la música. Luego escribí el guión y a partir de ahí fui haciendo cada capítulo teniendo en cuenta ambas partes, las imágenes y la obras de piano. Se puede decir que tanto la música como las imágenes fueron creadas al mismo tiempo.
─ Algunas tienen protagonistas, diríamos que serían imágenes figurativas, pero otras, sobre todo las del espacio y el microcosmos son más… abstractas y/o con posibilidades psicodélicas ¿Cuáles son más inspiradoras para usted?
─ Creo que me desenvuelvo mejor en la estética abstracta y la psicodelia, de hecho el poder convertir el piano en un sintetizador a traves del sensor me permite convertirlo en un “piano psicodélico”.
─ Leo un comentario y le comparan con Vangelis, Wendy Carlos o Tangerine Dream… ¡Apostamos fuerte!
─ Si me comparan con estos maestros para mí es un honor, desde pequeño he escuchado y tocado obras de todo tipo de compositores y bandas de este género: Vángelis, Tangerine Dream, Jean Michel Jarre, Enya, Mike Oldfield, Klaus Schulze. Sin lugar a duda estas músicas con texturas de sintetizadores y piano son mi cuna musical
─ En directo ¿va solo ante el peligro… o lleva todo perfectamente cronometrado?… ¿Hay margen de improvisación?
─ Claro que hay margen para la improvisación. Desde pequeño siempre me ha encantado improvisar y variar las obras para que estén en continuo movimiento y cambio. Aunque claro, no puedo estar improvisando todo el tiempo porque no existiría el hilo narativo del documental.
─ Utiliza un ‘sensor’ previo a la época completamente digital y que han tocado gente como Suzane Ciani o Herbie Hancock, pero que tiene ya su cuarto de siglo… ¿Cómo lo conoció y cómo ha sido el flechazo?
─ Sabía de la existencia de este sensor y que estaba descatalogado. La única opción de comprar uno era en el mercado de segunda mano. Me puse una alarma en Google y al año y medio me saltó un mensaje de que vendían uno en Berlín. Me fui para allá y lo compré. Sí, ha sido lo mejor que he podido hacer porque de esta forma puedo unir mis dos profesiones y pasiones que son el piano y los sintetizadores.
─ También tiene en la Red ‘tutoriales’ explicativos sobre su utilización del Moog Pianobar ¿qué resultado le están dando? ¿Ha despertado interés en este aparto ya casi olvidado?
─ Sí, necesitaba transmitir esta nueva forma de tratar el piano y decidí darle difusión en las redes. Recibo muchos mensajes y comentarios de pianistas y personas a las que, como a mí, les sorprende este invento.
"Valoro la cercanía de los espacios más íntimos aunque también es increíble tener la oprtunidad de tocar ante miles de personas"
─ Poder maniobrar, no solo en la música, sino también ‘tocar’ las imágenes ¿le hace sentirse más un músico o ya un artista visual?
─ Esta maravilla de sensor me permite también controlar cualquier parámetro de vídeo con las teclas del piano, lo que implica unas posibilidades infinitas para crear imágenes y hacer de lo visual un verdadero espectáculo. Sin lugar a duda soy músico y no artista visual, para ello viene conmigo un videoartista, Rubén Guirado, “Muwasha” que es el que se encarga de darle sentido a la programación de las imágenes. Pero como decía antes, no quiero destrozar la narrativa del documental añadiendo efectos sin ton ni son. Eso lo dejaré para el siguiente proyecto donde en todo momento programo con cada nota del piano un parámetro de vídeo.
─ Le vimos ante 15.000 personas con los Lori en el Wizink madrileño, y días después haciendo doblete en la antigua Caracol, con este proyecto audiovisual… ¿El tamaño no importa?
─ Valoro la cercanía de los espacios más íntimos aunque también es increíble tener la oprtunidad de tocar ante miles de personas.
─ Estos meses parece muy activo con su propio nombre ¿2024 es el año de Jota Jota Machuca?
─ Espero que este sea un buen año para mi proyecto pero tengo que compaginarlo con los conciertos de Lori Meyers y Lagartija Nick.