Campaña contra la violencia digital
Opinión, por Alejandro V. Casasola

El extraño caso de 'Rey Gitano', la película que no quieren que veas

Cultura - Alejandro V. Casasola - Domingo, 2 de Agosto de 2015
Alejandro V. Casasola reflexiona sobre la campaña en contra que ha sufrido la última película de Juanma Bajo Ulloa, 'Rey Gitano', incluso antes, de su proyección en los cines. Su análisis es una encendida defensa de la libertad y la independencia, tan cuestionadas y amenazadas.
IndeGranada


Alejandro V. Casasola (Barcelona , 1968) Granadino de adopción, Coleccionista compulsivo. Enamorado de los tebeos desde su infancia, apasionado de la retro informática, aprendiz de Geek. Criminólogo de formación, gestor cultural de profesión. Director del Salón Internacional del Cómic de Granada. Activo en redes sociales. Fotógrafo ocasional. Critico constructivo, aunque no todos lo vean así. @Alexcasasola
Esperaba con ganas el estreno de la nueva película de Bajo Ulloa y esperaba poder hacer una crítica sobre ella, pero las circunstancias que han rodeado este estreno y la críticas negativas llenas de odio, “casualmente” coincidentes en el tiempo,  que recomiendan con insistencia no ir al cine a ver la película me ha llevado a un análisis en el que no hablaremos de la película, si no de las críticas hacia la misma.
 
No se puede hablar del cine español actual sin hablar de Juanma Bajo Ulloa, que cambió la forma de hacer cine y el contenido de las películas con Airbag. En la actualidad se está proyectando en los cines españoles su última, por ahora, película “Rey Gitano” y se supone que el sector del cine debiera de estar contento por una  nueva producción realizada con financiación privada que genera trabajo y beneficio para todos…
 
Pero no, curiosamente la mayoría de los críticos de este país coinciden en un ataque a esta película con un mensaje final: “No la veas”, incluso días antes del estreno, solo con el visionado del tráiler. No recuerdo ninguna película que haya puesto a tanto “crítico” de acuerdo, aunque lo curioso es que cada uno plantea motivos distintos y diferentes entre sí. Tanta coincidencia no es casualidad, eso está claro. Si las críticas negativas fuesen ciertas sólo al 50 por ciento, estaríamos ante la peor película de la historia del cine español, y no es asi. No puede ser que la dirección sea mala, los actores interpreten mal, la historia sea aburrida, los planos eternos, se abuse de los planos de las piernas de una actriz, los chistes burdos y repetitivos, que tenga planos borrosos y que el 3D esté mal… depende del crítico correspondiente. No se salva ni la estupenda banda sonora que, por primera vez en el cine español, está formada por clásicos del pop rock internacional. Estas críticas destructivas, que borran los comentarios positivos, suelen comenzar con una o dos de estas consideraciones y suelen acabar con: “No vayas a verla” o “ir al cine a verla es tirar el dinero”.
 
Está muy claro que hay interés en que la película no funcione en taquilla, hay un interés de los lobbies de las producción audiovisual de las grandes cadenas de televisión en que no funcione un producto no controlado por ellas, no tienen bastante con ningunearla en su promoción, quieren destrozarla y mostrar la víctima a todos, para que nadie lo intente nunca más. No creo que sea porque la película no deje títere con cabeza en esta sociedad española, no creo que sea porque ataca sin piedad a la familia real española y así podría seguir analizando a quien critica la película. Creo firmemente que es un problema de poder y dinero: no quieren una prueba empírica de que en España otro cine es posible, que se puede hacer cine sin la aprobación de las grandes productoras y que se pueden tocar los temas que libremente decida el director. Es una caza al que no se somete, en la que han aparecido los rastreros, cuyo único objetivo en la vida es hacerle la pelota a los poderosos, disparando con consignas sobre lo mala que es una película que ni han visto ni piensan ver.
 
Así que ya sabes, aun tienes una oportunidad de ver la película que no quieren que veas. Tienes la que probablemente sea la última oportunidad de ver una película libre e independiente hecha en España, tienes la oportunidad de decirle a los poderosos que ya está bien de dirigir tu destino y que tú decides que producto cultural quieres ver.
 
Ve al cine y disfruta la película Rey Gitano por partida doble, por la película en sí y por el hecho de disfrutar tu libertad a decidir.