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Se suma a los otros cuatro letrados que, a lo largo de la historia de la Corporación, han recibido esta insignia

El letrado Fernando Mir Gómez es investido Colegiado de Honor de la Abogacía granadina

Ciudadanía - IndeGranada - Viernes, 5 de Julio de 2024
El Colegio de Abogados de Granada reconoce con esta distinción "el incuestionable papel del homenajeado en el engrandecimiento de la institución y la profesión"
Fernando Mir, ovacionado por sus compañeros tras recibir la insignia.
Colegio de Abogados
Fernando Mir, ovacionado por sus compañeros tras recibir la insignia.

El letrado granadino Fernando Mir Gómez ha recibido la insignia que lo acredita como Colegiado de Honor de la Abogacía granadina, un reconocimiento que la Corporación profesional reserva para colegiados que se hayan distinguido por su servicio o en el ejercicio de la abogacía "de forma continuada e intachable". 

"El colectivo de la abogacía te dice gracias por lo que has sido durante estos casi 64 años y es un orgullo tener un compañero como tú, del que aprender no sólo de la profesión, sino de la vida", ha comentado el decano, Leandro Cabrera, que se ha referido al nombramiento como un "acto de justicia" por los méritos profesionales y académicos y los valores que este maestro del Derecho representa. Así lo ha evidenciado el aforo completo de la ceremonia de imposición de la medalla, con numerosos compañeros, amigos, familiares y autoridades, y el aplauso espontáneo de los asistentes a su entrada a la sala. "El Colegio te nombra Colegiado de Honor, pero el honor eterno es del Colegio por tenerte como colegiado", ha expresado el diputado Tercero, Antonio Olivares, responsable de presentar la laudatio sobre Mir Gómez. 

"Yo, desde muy pequeño, siempre he querido ser abogado, sin ningún tipo de antecedentes, ni conocimiento", ha asegurado el protagonista de la jornada, que también ha repasado su historia personal y ha tenido unas emotivas palabras para sus cuatro hijos y siete nietos y, en especial, para su mujer María Angustias, fallecida justo hace siete años."Sin ella no hubiera sido posible", ha aseverado. Asimismo, ha compartido algunas reflexiones sobre el ejercicio profesional y la situación actual de la Justicia, con referencias a la importancia del letrado en la impartición de justicia y su merecida representatividad en las instituciones judiciales, la función de la pasantía para formarse en aspectos esenciales del Derecho y el necesario respeto a la Deontología.

El colegiado número 827 de la Corporación ejerce la profesión de abogado desde hace 63 años. Sin embargo, la concesión del título de Colegiado de Honor por la Junta de Gobierno, en sesión de 25 de junio, no responde a una cuestión de edad, sino a "su excelente conceptuación, social y profesional, de máximo prestigio; sus méritos académicos y profesionales; su disposición desinteresada a prestar sus servicios a favor tanto del Colegio como de los colegiados; y su incuestionable papel en el engrandecimiento de la institución y la profesión".  "Fernando ha puesto en común sus valores, méritos, experiencia y sapiencia jurídica para hacer un mundo mejor más allá del ámbito restringido de su despacho”, ha recordado Olivares, poniendo énfasis en la obligación de las nuevas generaciones de mantener su legado, en el que el entusiasmo ha sido el eje vertebrador y lo es hasta nuestros días. “Su dedicación al Colegio de Abogados ha sido permanente desde su adscripción al mismo hasta la actualidad, en la que sigue colaborando de forma activa e intensa en la mayor parte de sus actividades académicas, formativas y lúdicas, así como participando de forma prácticamente ininterrumpida y activa en todas las Juntas Generales, ordinarias y extraordinarias", recoge el decreto del nombramiento. De hecho, es miembro del Grupo Especializado de Abogados Senior de la Corporación, en el que sigue realizando una valiosa aportación al colectivo profesional. 

Destaca, entre otras actividades docentes, su labor como profesor en los Cursos de Prácticas Jurídicas desde 1986 a 1992, siendo uno de los grandes impulsores de esta formación en sus primeros años, cuando era impartida exclusivamente por el Colegio de Abogados de Granada. Asimismo, Mir Gómez ha desarrollado una brillante carrera como abogado desde que se incorporara a la abogacía en 1961 como pasante de Matías Cortés Martín, hasta su última etapa en el Bufete Mir Abogados que fundó en 2009 junto a dos de sus cuatro hijos, Fernando y Antonio, destacando especialmente en Derecho Procesal -Civil y Mercantil-, Laboral y Farmacéutico. Considerado también pionero en Mediación y Arbitraje, creó en colaboración con el Colegio el Tribunal de Arbitraje de Granada en 1993, del que ha sido secretario, al que suman otros cargos como el de vicesecretario y secretario general de la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Navegación de Granada, secretario del Consejo Andaluz de Cámaras Oficiales de Comercio, Industria y Navegación, Secretario del Instituto de Cultura Hispánica en Granada (Casa de América) o consejero general de la Caja General de Ahorros de Granada. 

Junto a él, sólo el abogado Javier López y García de la Serrana, desde 2015, goza en la actualidad de dicha distinción, aunque históricamente también fue concedida al que fuera presidente del Consejo de Estado Antonio Jiménez Blanco, fallecido en 2014, y a los letrados Francisco Cabezas Molina y Rafael Hitos Rodríguez en el año 1976. 

Nacido en Granada, el 2 de octubre de 1936, comienza sus estudios en el Colegio de San José y Santa Filomena (Institución Riquelme), cursando el Bachillerato en el Colegio La Inmaculada de los Hermanos Maristas de Granada (1947/1953) y licenciándose en Derecho por la Universidad de Granada (1954/1959).

El 24 de enero de 1961 se incorpora al Colegio de Abogados de Granada, siéndolo también del de Almería desde 1993 al 2000, e inicia el ejercicio como pasante del letrado Matías Cortés Martín, fundando el Bufete Mir Abogados en 2009, junto los letrados Fernando y Antonio Mir, sus dos hijos mayores de los cuatro que tuvo (María Angustias y Jesús completan la familia) con su ya desparecida mujer, María Angustias. Como letrado, ha destacado profesionalmente en todas las ramas del Derecho, siendo considerado un especialista en Derecho Procesal, ejerciendo su labor como abogado en materia Civil y Mercantil con una amplísima experiencia y un consolidado prestigio. También ha destacado en el ámbito del Derecho Laboral y del Derecho Farmacéutico, con especial incidencia en el Derecho Administrativo, y es considerado un pionero en materia de Arbitraje y Mediación.

En cuanto a su actividad docente, ha sido profesor ayudante de clases prácticas de Derecho Procesal de la Universidad de Granada, así como adjunto Interino de dicha Cátedra; profesor en los Cursos de Prácticas Jurídicas de 1986 a 1992 en materias de Derecho Privado, Público y Procesal; y profesor de Derecho Procesal en un curso del Colegio de Abogados de Ceuta, de Derecho Industrial en el Instituto de Ciencias de la Empresa -dependiente de la Cátedra de Derecho Mercantil de la Facultad de Derecho de Granada-, y de Derecho Privado y Procesal en el Instituto de Estudios Fiscales de Granada, además de ponente en numerosas jornadas y congresos.

En el ámbito institucional, Mir Gómez Asesor Jurídico ha sido vicesecretario y secretario general sucesivamente de la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Navegación de Granada (1962-2008), secretario del Consejo Andaluz de Cámaras Oficiales de Comercio, Industria y Navegación; secretario del Instituto de Cultura Hispánica en Granada (Casa de América); consejero general de la Caja General de Ahorros de Granada (1996-2000);  y miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Secretarios de Cámaras Oficiales de Industria y Navegación de España, perteneciendo a su vez a la Asociación Española de Abogados Especializados en Responsabilidad Civil y Seguros desde su constitución en el año 2001, la Asociación Andaluza de Derecho Sanitario o la Fundación Escuela Derecho Concursal y Mercantil de Granada.

Entre sus reconocimientos, cuenta con el Botón de Oro del Ilustre Colegio de Abogados de Granada, el II Premio Afán de Rivera del Ilustre Colegio de Abogados de Granada o la Medalla de Plata de la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Navegación de Granada, además de ser colaborador de Cruz Roja española y miembro del Grupo Especializado de Abogados Senior, en el que desarrolla destacada actividad.