OBITUARIO
Fallece el pintor Miguel Lozano Gómez, discípulo de Gabriel Morcillo
Despedimos a un maestro de la pintura.
ARCHIVO FAMILIAR.
Miguel Lozano, ante uno de sus bodegones de gran formato.
Ayer falleció el maestro pintor Miguel Lozano Gómez, a la edad de 96 años. Era el penúltimo discípulo vivo formado en el estudio de Gabriel Morcillo. Buena parte de su abundante producción pictórica ha quedado en propiedad de la ciudad de Granada, ya que la donó a la Fundación Agua de Granada y ésta al Ayuntamiento.
Miguel Lozano nació el 30 de diciembre de 1927 en la calle albayzinera de Fátima. Hijo de familia modestísima, su madre era invidente y él la hacía de lazarillo por la ciudad. A los catorce años su padre le buscó futuro como aprendiz de pintor en el taller de Gabriel Morcillo, por entonces en lo más alto de su carrera. En 1942 empezó a estudiar en la Escuela de Artes y Oficios, asignaturas de Dibujo Artístico y Pintura. Ya en 1953 ganó el primer premio de pintura, al que le isba a suceder los nacionales de Educación y Descanso en los años 1946, 1947 y 1949.
Conocida su elevada calidad artística, el Ayuntamiento de la capital lo pensionó para estudiar en el extranjero los años 1947 a 1949. En 1956 obtuvo plaza de profesor interino en la Escuela de Artes de Granada. Amplió formación en la Escuela Superior de Artes de Sevilla, donde se licenció en Bellas Artes. Más adelante accedió a cátedra de Dibujo Artístico y Pintura. Ha ejercido como docente en la Escuela de Artes y Oficios, en Escuela de Bellas Artes, Instituto Juan XXIII y los colegios Ave María, Santo domingo, La Normal y la Presentación.
En su etapa de profesor en la Escuela de Artes y Oficios, años sesenta. ARCHIVO FAMILIAR.
A lo largo de su dilatada carrera ha expuesto su obra en el Liceo de Granada, la Fundación Rodríguez-Acosta, la Escuela de Artes y Oficios de Guadix, Caja Provincial de Ahorros, Galería de Ceferino Navarro, etc. Su última exposición tuvo lugar en el Centro Cultural Gran Capitán en marzo de 2020.
Se le destaca como buen enseñante. Ha formado a infinidad de alumnos en su estilo de pintura realista. Entre los últimos se encuentran los profesores Juan García Pedraza y Antonio Rodríguez Barbero. De él se ha escrito (Carlos Cano Piedra) que “pintaba cosas entrañables en composiciones luminosas y equilibradas, construidas con volúmenes proporcionados como sólo lo sabe hace un buen dibujante, y dotadas de un colorido que nacía en razones administradas por lo poético”. García Pedraza, que lo visitaba todas las semanas, destaca de él que “era portador de una presencia cabal y de una elegancia personal que trasmitía a sus alumnos con paciencia y cariño”.
Sus restos mortales están siendo velado en la sala 10 del tanatorio del cementerio de San José de la capital. El entierro será a las 15.30 horas.
Descanse en paz.
