Agentes de la Policía Nacional en Baza han detenido a un varón de 63 años por disparar con una escopeta de caza del calibre 12 a un perro, hiriéndole de gravedad y al que tuvo que amputársele una pata por las graves lesiones que sufrió.

Una llamada al 091 alertó del disparo y de que en el lugar había un rastro de sangre. Ese reguero de sangre llevó a los agentes hasta un perro malherido. El animal fue trasladado a una clínica veterinaria.

Junto con agentes de la Policía Local de Baza que también se hallaban en el lugar, comprobaron que dicho reguero de sangre se introducía hasta una propiedad particular donde se hallaba el dueño de la misma en la puerta, el cual le manifestó que había perros que molestaban a sus gallinas. Tras preguntarle si poseía algún arma de fuego, les hizo entrega de una escopeta de caza del calibre 12 de la que disponía de toda la documentación en regla, encontrando en la misma residuos de disparo, hallando además en la vivienda un cartucho disparado de escopeta junto a restos de sangre.

Ante tales evidencias, el arma fue intervenida y el hombre detenido por un presunto delito de maltrato animal. Los hechos se pusieron en conocimiento del juez.