El Defensor del Pueblo Andaluz confía en que "se agilice" la respuesta a Juana Rivas, a quien apoya para alcanzar una solución
El Defensor del Menor de Andalucía, Jesús Maeztu, confía en que "se agilice" la respuesta a la situación de Juana Rivas, la madre de Maracena (Granada) que permanece en paradero desconocido con sus hijos después de que un Juzgado ordenara el pasado miércoles la entrega de los dos niños al padre, que vive en Italia y que fue condenado en 2009 por maltratarla, toda vez que ha subrayado que "mantiene el apoyo pleno" a Rivas para alcanzar una solución que "garantice que los menores no sufran un clima de violencia".
Así, a través de su perfil de Facebook, consultado por Europa Press, el Defensor ha señalado que en los últimos días la institución "está trabajando para encontrar una respuesta satisfactoria, desde el respeto a las resoluciones judiciales, en el caso de Juana Rivas", a la que asegura "mantiene un apoyo pleno" para alcanzar una solución que "garantice que los niños no sufran un clima de violencia.
Asimismo, ha indicado que la institución "venía reclamando" desde hace años "la equiparación de los menores a sus madres en los casos de violencia de género" --Informe Especial 'Menores expuestos a violencia de género: Víctimas con identidad propia'-- lo que se logró con la reforma de la ley en 2015. Por tanto, según la normativa, los menores expuestos a violencia de género "son reconocidos como víctimas y los declara sujetos de la protección que la ley brinda a sus madres", apunta.
De este modo, señala que "para avanzar en este objetivo, siguen trabajando en la queja que al respecto presentó el pasado martes el Ayuntamiento de Maracena sobre la denuncia por violencia de género que presentó Juana Rivas y que se encontraría a la espera de su traducción al italiano". "Vamos a estudiar si se ha producido alguna irregularidad o un retraso injustificado de la Administración de Justicia", manifiesta Maeztu.
Por último, el Defensor del Menor ha vuelto a asegurar que la cuestión principal es que los dos menores estén "en un clima de no violencia".