El PP de Granada se rompe
La distancia entre las bases y sus dirigentes no es algo exclusivo del PP. Pero en una organización tan monolítica como la del partido conservador en Granada, nada acostumbrado a la discrepancia interna, que el descontento se revele y se deje notar es inédito en esta última década.
El PP de Granada se ha convertido en un aparato que gana elecciones, eso sí, dirigido por un grupo de políticos fieles a Sebastián Pérez, con buenos sueldos, bien como cargos públicos o asesores, que acumulan puestos. Pero ha dejado tras de sí un buen número de descontentos que ahora se ven con fuerza para protestar. Nada tienen que perder.
En trece años, Sebastián Pérez se ha ganado adeptos pero también un creciente grupo de críticos, con las agrupaciones abandonadas en los municipios, a las que solo se presta atención para exigirle en campaña electoral
En el reparto de cargos y confianza se haya buena parte del descontento. Hasta entre los elegidos, ni siquiera hay sintonía. La elaboración a dedo de las listas al Congreso y al Senado supuso un quebradero de cabeza para que la ejecutiva tragara. Apuestas personales como la del ex banquero Luis González para el Senado fueron contestadas y más que palabras se cruzaron para el orden de candidatos al Congreso tras Carlos Rojas, que venía hecho desde arriba.
Y todo para una actividad inédita en las Cámaras baja y alta de los representantes del PP, que son mayoría.
En trece años, Sebastián Pérez se ha ganado adeptos pero también un creciente grupo de críticos, con las agrupaciones abandonadas en los municipios, a las que solo se presta atención para exigirle en campaña electoral.
Las alabanzas de Rajoy y la llamada a la unidad
Hace poco más de una semana el presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, en la Convención Regional del PP en Granada, elogió el trabajo de Juan Manuel Moreno y Sebastián Pérez.
Estáis haciéndolo muy bien”, les dijo Rajoy a los dos dirigentes para añadir: “y todos los españoles necesitamos que sigáis trabajando por ese camino”.
Pero Rajoy, como ya se sabe, ha elogiado a dirigentes provinciales en sus mítines por toda España, a algunos, en mensajes que se han convertido en virales por lo que luego ha ocurrido con ellos. Una cortesía necesaria, que magnifican los elogiados.
Rajoy, junto a Moreno y Pérez, en la Convención Regional del PP. Miguel Rodríguez
A Rajoy le dijo que el PP de Granada es un “partido fuerte y unido”, pero más adelante en su discurso reclamo un partido “fuerte, unido, cohesionado” porque “sin unidad, no hay triunfo”.
En aquella Convención Regional, sorprendió que Sebastián Pérez, ante Rajoy, apelara a la unidad del partido. “Un partido fuerte, unido, cohesionado” porque “sin unidad, no hay triunfo”. Solo se entendió en clave interna, ante el nerviosismo del próximo Congreso Provincial en el que ya hay un candidato, Juan García Montero, y se prepara una tercera vía de militantes descontentos, que se autodenomina La Fuerza de las Bases.
Unidad rota empezando por la capital
Pero esa unidad a la que no para de apelar Sebastián Pérez, no es más que una ilusión.
Más que un síntoma fue la división en el grupo municipal de la capital, apenas ocho meses después de dejar el gobierno después de trece años de mayoría aplastante por la operación Nazarí, el más más grave caso de corrupción que nunca antes investigó un juzgado. Por primera vez la ausencia de concejales permitió la aprobación de un asunto relevante, las ordenanzas fiscales. Pero en clave interna, fue más grave aún la rebelión para no votar la personación del Ayuntamiento en el caso Nazarí.
Los aún fieles al ex alcalde Torres Hurtado apelaron a la conciencia. La respuesta, un expediente abierto a Fernando Egea, Telesfora Ruiz, Francisco Ledesma y Juan García Montero, que de prosperar le imposibilitaría ser candidato.
Juan García Montero dialoga con concajales de C´s en pleno. IndeGranada
El PP de Granada aún no ha sabido desmarcarse de la Operación Nazarí. La brecha que ha dejado en el grupo municipal, se extiende a la organización. Cuando el pasado lunes Torres Hurtado rompió su silencio para declarar que tras la Operación Nazarí había "una maniobra" de Sebastián Pérez por "intereses personales y políticos", volvió a sobrevalorar sobre la organización provincial un temor. El que Torres Hurtado –quien dijo: "A mí, personas del PP de Granada, hablo por su presidente, me han fusilado políticamente en las tapias del cementerio de Granada"- hable de su relación con el presidente provincial y de por qué también abandonó el Ayuntamiento, cuando salieron el ex alcalde y la concejal de Urbanismo, Isabel Nieto.
La desconexión con el Gobierno
A pesar de presumir de la conexión de Granada con el Gobierno, los hechos lo han desmentido con rotundidad. El último episodio, sonroja. En el pleno municipal de la capital del pasado viernes, el grupo del PP conoció que fue el Ministerio el que pidió relevar al director del Festival Internacional de Música y Danza, Diego Martínez, al que defendió hasta el extremo para criticar a los socialistas.
Puede que de aquí al Congreso Provincial, si no logra calmar los ánimos y enderezar el rumbo, aparezca una nueva candidatura con el respaldo oficial de la dirección regional y nacional
Con el AVE, el PP y su presidente, Sebastián Pérez, se ha quedado congelado en la inversión millonaria del Gobierno del PP que permitió acabar la A-7. Pero la organización provincial y sus militantes asisten perplejos al continuo ninguneo de sucesivos ministros de Fomento que no terminan de concretar cuándo llegará la Alta Velocidad y sin fijar el compromiso de soterramiento, mientras en otras provincias se firma.
El peloteo continuo del PP de Granada hacia el Gobierno ha suplantado a la necesaria y legítima reivindicación. ¿Hasta cuándo le servirá el mensaje de que Rajoy ha sido el mejor presidente del Gobierno para Granada por las infraestructuras? El tiempo avanza y las exigencias son otras.
Demasiado ruido
Sebastián Pérez no ha querido pronunciarse aún sobre el Congreso Provincial. Ha reiterado que cuando se convoque hablará. Pero desde hace meses ha comenzado la campaña para su reelección. Él y sus fieles, con desagradables comentarios que desde la propia casa vuelven a desmentir la unidad del partido.
Tras una entrevista en ABC en la que Juan García Montero se pronunciaba sobre su candidatura, el diputado Santiago Pérez dijo en twitter: "Cuando leo y escucho algunas cosas de compañeros aspirantes a la dirección del PP de Granada siento sonrojo intelectual y preocupación".
Si algo caracteriza al PP de otros partidos, es la férrea disciplina y la nula aceptación de la discrepancia interna. El ruido, monumental en el PP de Granada, puede ser castigado. Y el PP nacional, aunque con las mismas caras, quiere abrir una nueva etapa, en un nuevo periodo social.
Pese a que Juan Moreno perdonó a Sebastián Pérez, incorporándolo como coordinador en Andalucía en la campaña electoral de las Generales, no se olvida que el presidente provincial llegó a apoyar cuando ya era candidato oficial el actual presidente regional a José Luis Sanz, de la mano del actual ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido.
Y un partido desunido, aunque gane elecciones, como reitera Sebastián Pérez, no gusta a nadie. Puede que de aquí al Congreso Provincial, si no logra calmar los ánimos y enderezar el rumbo, aparezca una nueva candidatura con el respaldo oficial de la dirección regional y nacional. El aviso, lo tiene sobre la mesa.