El presidente provincial del PP de Granada, Sebastián Pérez, ha denunciado que Cájar lleva "siete años esperando" la edificación de un nuevo colegio, recordando que las instalaciones del centro de la localidad están "obsoletas" y "no cumplen con la legalidad mínima". Según Pérez, el municipio cuenta, además, con problemas de escolarización "por falta de espacio". 

Con esta denuncian dan continuidad a la campaña 'Rescata la urna', emprendida por el PP para denunciar "incumplimientos" de la Junta. 

"Aquí nos prometieron hace siete años un nuevo colegio y la actual delegada de la Junta vino a decir que, cuanto antes, fuera las aulas prefabricadas y el nuevo colegio estaría funcionando. Pero lo que tenemos es el descampado y charcos", ha apuntado el presidente del PP provincial.

A juicio de Sebastián Pérez, "lo mínimo que puede hacer el gobierno socialista, que está constantemente fustigando a todos los granadinos, es dignificar la educación y darle un sitio a los alumnos para que puedan ejercer su derecho". En este mismo sentido, también ha pedido la mejora de las instalaciones para que el profesorado pueda realizar su trabajo en unas instalaciones "óptimas". 

El retraso en la construcción de este centro educativo es, en sus palabras, "una muestra más de que las cosas con el socialismo se eternizan. Siempre estamos en una espiral donde el engaño y la mentira son la bandera de un socialismo decrépito".

Durante el acto, la portavoz del PP local, Mónica Castillo, ha recordado que la construcción del nuevo colegio fue uno de los principales objetivos del PP de Cájar desde el año 2007, puesto que "el anterior tenía deficiencias y no cumplía con los requisitos previstos por la legislación aprobada por la propia Junta". Por ello, "en el 2009 se cedieron los terrenos para que la Junta cumpliese con su palabra y construyese el colegio".

Ha agregado que en 2010 "el PSOE autonómico y municipal vendieron que habría un colegio nuevo para Cájar pero tras siete años nos encontramos con los terrenos y sin construir".  Ha cuestionado los planes de Educación que, según ha dicho, "ahora nos van a hacer un remiendo. Quitarán las aulas prefabricadas en el actual colegio y van a construir dos clases para que esos niños no se queden en la calle", un hecho que ha calificado como "un nuevo pegote y seguir teniendo un colegio ilegal puesto que nos van a quitar espacio destinado a patio y a espacio de juego para nuestros niños". La portavoz local también ha criticado que la primera medida tomada por el PSOE respecto a este tema al llegar a la Alcaldía, "mediante un pacto que ya está roto, fue tapar el cartel que tenemos justo a la entrada del pueblo donde reivindicábamos el nuevo colegio".