Izquierda Unida pide igualdad de oportunidades para las mujeres rurales
"En España, el 17,6% de la población reside en áreas rurales, con un 51% de hombres y un 49% de mujeres. Esta brecha de género es más notable en las zonas rurales más pequeñas, y es especialmente pronunciada en la población en edad de trabajar, aunque las cifras varían en los grupos de edad mayores de 65 años".
Así lo ha trasladado Mari Carmen Pérez, diputada provincial y coordinadora de IU en Granada, que ha destacado "la importancia de estas fechas en la lucha por la igualdad de género en las zonas rurales". Ha señalado que hace unos años, el Día Internacional de la Mujer Rural pasaba "desapercibido", pero "gracias al esfuerzo de la sociedad, se ha logrado visibilizar el papel fundamental que desempeñan las mujeres en sus municipios".
En una nota de prensa que recoge su comparecencia ante los medios, la coordinadora provincial de IU ha apuntado que "las mujeres rurales enfrentan desafíos económicos significativos, con una tasa de inactividad del 38,4% en comparación con el 15,1% de los hombres en estas áreas. También sufren una fuerte segregación laboral, concentrándose en el sector servicios, donde el 78,5% de las mujeres trabajadoras están empleadas. Además, ocupan predominantemente puestos de trabajo con condiciones laborales desfavorables, como ingresos entre 400 € y 1,000 €, contratos temporales, y jornadas laborales parciales".
La falta de servicios esenciales en las zonas rurales, como transporte público, acceso a internet de calidad y servicios de atención a personas dependientes, "tiene un impacto negativo en la vida de las mujeres rurales. Esto conduce a una sobrecarga de tareas de cuidados y limita su acceso al empleo y la formación".
Izquierda Unida ha destacado "los avances legislativos del feminismo rural en los últimos tiempos. La perspectiva de género se ha incluido en la Política Agraria Común (PAC) en España, brindando apoyo directo a las explotaciones agrarias lideradas por mujeres. Pero queda mucho camino por recorrer, sobre todo en Andalucía, que no cuenta con un Estatuto para reducir las brechas de género, a diferencia de otras regiones como Castilla La Mancha, Aragón".
En este sentido, Izquierda Unida urge la aprobación de un "estatuto andaluz, que garantice igualdad en todo el territorio, así como a impulsar a las mujeres en el sector agrario a través de la Política Agraria Común (PAC) y la Titularidad Compartida". Además, la organización aboga por la "profesionalización de los cuidados, la mejora de la participación de las mujeres rurales en la esfera pública y privada, y la asignación de más recursos para combatir la violencia de género en las zonas rurales".
Las líneas de trabajo pasan por "fomentar la educación y formación, impulsando programas de educación y capacitación específicos para las mujeres rurales. Promover medidas para apoyar el emprendimiento y la diversificación económica en las áreas rurales, brindando a las mujeres herramientas y recursos para desarrollar sus propios proyectos económicos. Acceso a Servicios de Salud y Bienestar, mejorando la atención médica en las zonas rurales. Invertir en infraestructuras rurales, incluyendo acceso a Internet de alta velocidad, transporte público y servicios básicos que mejoren la conectividad. Avanzar en la participación activa en la toma de decisiones".
La formación de izquierdas también ha denunciado "la vulnerabilidad de las mujeres rurales ante la violencia de género en estas áreas". En este sentido ha recordado que el 'Observatorio de violencia de género en el medio rural' de FADEMUR reveló que de las 50 víctimas en 2023, 17 perdieron la vida en pueblos con menos de 20,000 habitantes. "La violencia de género en las zonas rurales tiende a ser más invisible y se perpetúa debido a la falta de recursos y apoyo adecuados en estas comunidades".
Asimismo, Izquierda Unida ha exigido medidas concretas para combatir el "sexilio rural," que hace referencia al éxodo de personas de orientación sexual diversa de los pueblos. Mari Carmen Pérez, coordinadora provincial de IU, ha subrayado que"esto obliga a muchas mujeres LGTBI+ a vivir lejos de su comunidad, alejándose de sus raíces y luchando por ser ellas mismas en su entorno".
Mari Carmen Pérez ha subrayado la importancia de que todas las autoridades establezcan "políticas eficaces para abordar la carencia de servicios en las zonas rurales y enfrentar los desafíos de la despoblación y el envejecimiento". En sus palabras, "Las mujeres desempeñan un papel fundamental en el progreso económico y cultural de nuestras localidades. Es crucial que las instituciones promuevan redes de apoyo financiero a las mujeres emprendedoras como un medio para revitalizar nuestras comunidades".