El grave desencuentro entre el cuatripartito de Maracena que encabezan PP y VOX con la Policía Local del municipio se ha traducido en el desmantelamiento de la unidad encargada de la atención a las víctimas de violencia de género en el municipio.

Así lo han dado a conocer agentes de este cuerpo en un comunicado muy crítico con el equip ode gobierno, al que responsabilizan de esta situación por "la falta de medios, la falta de compromiso político y decisiones de carácter ideológico". 

El comunicado policial explica que "la totalidad de los agentes" de Policía Local del municipio "se han visto obligados a rechazar formar parte de la unidad específica de VIOGÉN". Esta renuncia se ha realizado mediante escritos dirigidos al Consistorio en los que los agentes han justificado su renuncia en "el clima de incertidumbre e ineficacia en la gestión de la Concejalia de Seguridad", "la escasez de medios, vehículos, vestuario, aparatos electrónicos", así como "la intención de incorporar a agentes de dudosa reputación y afines políticamente a la Concejalía dirigida por VOX". A todo ello se suma "la pretensión de privatizar parte del servicio de Seguridad Pública a través de vigilantes de seguridad que ejercerían sus servicios en espacios públicos, suponiendo una iniciativa muy peligrosa para la propia Policía Local, que se vería obligada a auxiliarlos dada sus inexistentes competencias”, situaciones que generan un "entorno inadecuado para el desarrollo de esta unidad, para la seguridad de las victimas y la preservación de su bienestar". 

Este hecho, reconocen los agentes, "profundiza en una herida abierta en la gestión de un servicio que no pasa por su mejor momento". Desde el Ayuntamiento, "lejos de tratar de resolver el conflicto generado, cada vez agregan más gasolina al fuego".

"A los compañeros nos resulta muy indignante que planteen gastos desorbitados en empresas privadas o convenios con otros Ayuntamientos a mayor costo, y sean incapaces de dotarnos de un vehículo adecuado para patrullar, o facilitarnos un teléfono móvil que sea suficientemente funcional para atender a las víctimas", denuncia el comunicado policial sobre la situación y el anuncio de recurrir a la seguridad privada planteado por VOX, que está al frente de la Concejalía de Seguridad Ciudada.

"Hay que entender que nosotros vamos a seguir realizando el trabajo de protección de las victimas en nuestros turnos de trabajo, pero se está perdiendo un refuerzo 24 horas del que hasta ahora han venido beneficiándose todas las mujeres afectadas", exponen para agegar que los propios policías valoran que "el coste de esta unidad es ridículo en relación al servicio que se presta, y aun así se intenta utilizar como moneda de cambio para acallar las reivindicaciones que se hacen desde el cuerpo".

El cuatripartito culpa a los agentes

Según informa Europa Press, el gobierno cuatripartito ha asegurado que las labores de vigilancia y protección de víctimas de violencia de género, en el marco del sistema Viogén, quedan en manos de la Guardia Civil.

"Este Ayuntamiento quiere hacer constar que son los mismos medios que se vienen teniendo en los 16 años anteriores y por los cuales nunca se ha dejado de prestar el servicio", han indicado desde el consistorio aludiendo a mandatos anteriores, con gobiernos del PSOE. El cuatripartido ha condenado esta actitud, incidiendo en que lo que "debe primar siempre en el ejercicio de sus funciones es la protección a este colectivo tan vulnerable de la sociedad". No obstante, ha agregado que ha comunicado este extremo a Guardia Civil de Maracena, que, según han añadido desde el Ayuntamiento, "ha manifestado que seguirán dando protección a estas víctimas como venían haciendo ellos y que si fuese necesario, reforzarían el servicio".

"El Ayuntamiento de Maracena quiere tranquilizar así a las víctimas de violencia de género y a la ciudadanía ya que el servicio estará totalmente cubierto", han concluido desde el consistorio.

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