Lorca serán todos otra vez
"Desde el minuto uno" se pensó en hacer algo "diferente" para recuperar el consenso de los primeros años del homenaje; esa fue la encomienda del presidente de la institución, José Entrena, como recordó la diputada provincial de Cultura y Memoria Histórica y Democrática, la alcaldesa de Alfacar, Fátima Gómez. Será un acto "sencillo" y "emotivo", en el que se dará "voz" a familiares y asociaciones para "reparar, hacer justicia y contar la verdad".
El próximo 17 de agosto se rendirá homenaje a Lorca y al resto de víctimas que no tienen su nombre, para que "no pasen desapercibidas", en palabras de Gómez, que aseguró que no hay intención alguna de remover heridas, solo recordar a las víctimas, las que no se llaman Federico, anticipándose a las críticas que poco después llegarían, y con fuerza, del PP.
"Federico no murió, lo mataron por pensar de determinada manera, por defender la República, por representar los ideales de libertad y justicia social", y recordar al poeta, al que mataron en algún lugar entre Víznar y Alfacar "los defensores del pensamiento único y de la intolerancia", y a todos los que yacen en cunetas y bajo tapias de cementerio, "es de Justicia", resaltó la presidenta en funciones de la Diputación, María Ángeles Blanco.
Pero el PP entiende que vincular el homenaje a la memoria histórica es “enturbiar” el sentido del acto, hacer un uso “partidista” y “subjetivo” del poeta; recurrir a “la muerte y el dolor”. Así se pronunció, a través de un comunicado una de sus diputadas provinciales, Rosa Fuentes, que consideró más adecuado el sentido que su partido dio en el anterior mandato a este homenaje, apostando por un Lorca vivo, no muerto. Lo contrario, argumenta el PP, es “alimentar el dolor y las desigualdades”, “remover el pasado”. “Nunca se cerrarán las viejas heridas si no se avanza”, opinó.
Contra el silencio
El homenaje del 17 de agosto nace "de la generosidad", según la diputada de Cultura y Memoria Histórica y Democrática: la de Soleá Morente, "que no dudó ni un minuto en aceptar; la de los familiares que compartirán sus testimonios con los asistentes; la de los representantes de las asociaciones memorialistas, que leerán un manifiesto; la del presentador, el periodista José Antonio Barrionuevo.
Soleá Morente con María Ángeles Blanco y Fátima Gómez. miguel rodríguez
Para Soleá Morente, la participación en el homenaje a Lorca la une a su padre, porque fue él quien la acercó a la obra del poeta. Su padre, Enrique Morente, le hablaba de Federico "como si fuese de la familia", lo que ha hecho que sus poemas y sus obras de teatro formen parte de su vida.
Y el repertorio que ofrecerá en Alfacar, donde estará acompañada al piano por J.J.Machuca, se basará en la obra de Enrique Morente, incluyendo versiones recogidas en Omega, el trabajo que grabó con Largatija Nick y que supuso todo un hito musical.
Su intención, "darle voz" a las víctimas, ha dicho tras recordar que estos días lee un libro que recoge testimonios "escalofriantes" de víctimas del franquismo, en particular una carta de Humberto Baena que ha dicho haberle impactado. Ir donde está "el silencio" para "darle voz" a las personas que fueron "sepultadas por los poderosos, por el poder".