El temporal de lluvia de los últimos días ha afectado al castillo árabe de Salobreña y ha obligado a cerrar sus puertas, puesto que los trabajos de limpieza y restauración son incompatibles con la visita pública.

Tras recibir los informes técnicos del jefe de patrimonio municipal y del ingeniero encargado de las obras de rehabilitación del monumento nazarí, el Ayuntamiento ha decretado el cierre del castillo para garantizar la seguridad de los visitantes.

El informe técnico señala que hay zonas anegadas en las distintas excavaciones realizadas, en la mayor parte de ellas el terreno ha drenado el agua, pero han quedado cubiertas de barro. También hay desprendimientos en cabezas de muros de muy poca altura, desplomes de muretes de contención de escasa entidad, inundación de la explanada que da acceso al baluarte del aljibe, así como en la zona de recepción de visitantes.

Troneras anegadas, aparición de pequeños socavones en distintas zonas y asentamientos de terreno en tierras de nueva aportación son otras de las afecciones que se han producido, según informa en un comunicado el Ayuntamiento de Salobreña.

En la Torre de la Coracha, zona que queda fuera del ámbito de las obras de restauración, se ha producido un pequeño asentamiento que ha provocado la aparición de grietas y hundimientos de forma mucho más acusada que anteriormente.

Por tanto, y aunque los daños y desperfectos en general no son graves, sí pueden afectar a la integridad física de las personas que visiten el Castillo. Además el desarrollo de los trabajos necesarios para la limpieza de las zonas afectadas y el arreglo de daños son incompatibles con la visita pública, explica la alcaldesa de la villa, María Eugenia Rufino.

Estos trabajos se van a solapar con los que estaban pendientes de la propia obra de rehabilitación del Castillo, por lo que la entidad local no ha podido ofrecer una fecha para su reapertura, aunque se espera que en todo caso sea a comienzos del próximo año.