La alberca central del Patio de los Arrayanes de la Alhambra, uno de los puntos más fotografiados por quienes visitan el monumento, ofrece estos días una imagen inusual al haber sido vaciada de manera temporal en el marco de las tareas de restauración que está desarrollando en este enclave el Patronato de la Alhambra y el Generalife.

Las tareas de restauración se están llevando a cabo en el surtidor del Patio de los Arrayanes con el objetivo de devolverle la integridad física y estética a través de diversos tratamientos de limpieza y consolidación del material. El vaciado temporal de la alberca central es necesario para poder restaurar en su totalidad la fuente y su pie de apoyo, según detalla el Patronato de la Alhambra a través de sus redes sociales, consultadas por Europa Press.

El Patio de los Arrayanes se ha llamado de diversas formas a lo largo del tiempo; entre ellas, Patio del Estanque o de la Alberca, precisamente por este estanque, de 34 metros por 7,10 metros, que divide el patio longitudinalmente y se abastece de agua gracias a dos pilas de mármol situadas en cada extremo.

A ambos lados del patio se encuentran dos naves de aposentos y, en los lados menores, se levantan unos pórticos, sostenidos por columnas de capiteles cúbicos, de siete arcos semicirculares adornados con rombos calados e inscripciones de alabanza a Dios. El arco central es mayor que los otros seis, y presenta enjutas macizas con decoración de ataurique y capiteles de mocárabes.