'Titos y Titis'
Empezaré con una sentencia: me repugna la corrupción, venga de donde venga. Especialmente me duele la que proviene de personas que se aprovechan del cargo político obtenido amparándose en las siglas de un partido, que el 2 de mayo cumplirá 144 años de historia, que se fundó con los valores de honradez y honestidad en sus representantes.
El Partido Popular y toda su artillería mediática aliada han querido convertir el caso Mediador en el caso PSOE, aunque también podría denominarse caso CEOE o caso Benemérita, dados los otros implicados
En los últimos días, de nuevo la corrupción se ha colocado en el centro de la actualidad mediática especialmente con el caso Mediador en el que aparecen como cabecillas un empresario, Marco Antonio Navarro, y un ex general de la Guardia Civil, Francisco Espinosa, y en el que está implicado un diputado canario socialista, Juan Bernardo Fuentes, conocido como Tito Berni. La justicia investiga una trama que habría llevado a cabo sobornos, tráfico de influencias, blanqueo de capitales, falsificación de documentos y pertenencia a una organización criminal. Este caso está aliñado con los ingredientes de prostitutas y drogas que tanto gusta al periodismo amarillista.
El Partido Popular y toda su artillería mediática aliada han querido convertir el caso Mediador en el caso PSOE, aunque también podría denominarse caso CEOE o caso Benemérita, dados los otros implicados. Para ello han disparado con los ojos cerrados y han querido implicar a más parlamentarios socialistas canarios, “porque viajaban en el mismo avión juntos”, y de camino hacerlo extensivo a los de otras comunidades autónomas que comieron en alguna ocasión con Fuentes, coincidieron en algún acto con él o, ya puestos, porque les vieron sentados cerca o salir juntos por la puerta de la Carrera de San Jerónimo.
Lo que sí sabemos a ciencia cierta es la reacción rápida y contundente de la dirección del PSOE que ha condenado como “denigrantes e incompatibles con el servicio público” estos comportamientos y que expulsó del partido, en menos de un día, cuando se supo de la implicación del ya exdiputado canario
A falta de que avance la investigación y se esclarezca este tema, lo que sí sabemos a ciencia cierta es la reacción rápida y contundente de la dirección del PSOE que ha condenado como “denigrantes e incompatibles con el servicio público” estos comportamientos y que expulsó del partido, en menos de un día, cuando se supo de la implicación del ya exdiputado canario. Además, se ha asegurado que seguirán el mismo camino con otras personas del partido si resultaran implicadas. Un ejemplo de comportamiento ha sido el de la presidenta del Congreso que ha ordenado custodiar las dependencias y los ‘aparatos’, del susodicho cerrando el despacho hasta que la policía judicial proceda al registro de los dispositivos y sean puestos a disposición del titular del martillo de la justicia. ‘Otros’ lo hubieran resuelto usando otro martillo, el de destrozar discos duros de ordenadores.
El contrapunto a esta reacción ante la aparición de un caso de corrupción lo encontramos en el Partido Popular que lleva meses sin actuar contra Ángeles Muñoz, alcaldesa de Marbella, y conocida como la ‘Titi’ entre los de su banda
El contrapunto a esta reacción ante la aparición de un caso de corrupción lo encontramos en el Partido Popular que lleva meses sin actuar contra Ángeles Muñoz, alcaldesa de Marbella, y conocida como la ‘Titi’ entre los de su banda. Al contrario, ha sido confirmada como candidata para revalidar su puesto al frente de la alcaldía y continúa blindada en su otro puesto en el Senado, muy cerca de Núñez Feijóo, que ha abrazado a la Titi y que le ha faltado, por ahora, decir que “es el espejo en el que se mira”, parafraseando a MpuntoRajoy con Camps.
Tampoco ha reaccionado el PP a la petición de la Fiscalía de 15 años para el Tito Fernández Díaz, ex ministro de Interior, por su implicación en el espionaje a Bárcenas para robarle la información sensible que tuviera del PP, a quien acusa de encubrimiento, malversación de fondos y delito contra la intimidad. En este sumario hay otros altos dirigentes del Ministerio pringados además del perla del excomisario Vallejo.
Hace unos días, precisamente, ha salido a la luz que, en plena investigación de la operación ‘Kitchen’, que el número dos del Ministerio del Interior en la época de Rajoy, Francisco Martínez, se intercambiaba mensajes de guasap con el presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro, en el que este último informaba al entonces Secretario de Estado de Seguridad, cuando había secreto de sumario, sobre la marcha de la investigación
Hace unos días, precisamente, ha salido a la luz que, en plena investigación de la operación ‘Kitchen’, que el número dos del Ministerio del Interior en la época de Rajoy, Francisco Martínez, se intercambiaba mensajes de guasap con el presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro, en el que este último informaba al entonces Secretario de Estado de Seguridad, cuando había secreto de sumario, sobre la marcha de la investigación y le pasaba información sobre el contenido de los interrogatorios de la instrucción judicial con el objetivo de ayudarle en la preparación de la defensa.
No cabe en este caso el apodo de ‘titos’ para estos implicados pero algún tipo de parentesco deben tener, aunque yo me reservo el de ‘primos’ para los ilusos que todavía se creen que la trama ‘Gürtell’, la organización montada para lograr contratos en administraciones públicas gobernadas, fue un montaje de Rubalcaba como toda la cúpula del PP reunida defendió públicamente con desparpajo, aunque los demás tuviéramos el sonrojo que a ellos les faltaba. Todavía tengo grabadas mentalmente las imágenes de aquél cierre de filas, con Rajoy a la cabeza, diciendo que la Gürtell era una invención de la oposición.
El caso es que el Tito Berni ha superado en popularidad al hermano de Ayuso y ha sido utilizado por la carcundia como tapón multiusos para que no se hable de la serie CorrruPPción en Marbella
El caso es que el Tito Berni ha superado en popularidad al hermano de Ayuso y ha sido utilizado por la carcundia como tapón multiusos para que no se hable de la serie CorrruPPción en Marbella, cuyo penúltimo capítulo ha sido el ‘oportuno’ fallecimiento del marido de la Titi que eleva en el PP el número de muertes oportunas a varias decenas ya, Rita Barberá, Blesa, Yáñez, Lapuerta, Paco ‘Avión’… además de la del juez Pedreira que investigaba la Gürtell; también ha servido para intentar que corra un tupido velo sobre otro caso ‘aislado’ de corrupción, el del expresidente de Murcia, condenado a tres años de prisión por dos casos de prevaricación y uno de falsedad continuada, o en fin para que no se hable mucho del abandono del Congreso del famoso diputado popular Alberto Casero, al que no han podido sostener más en su escaño, y ha sido empujado finalmente por el Tribunal Supremo hacia el banquillo “por firmar contratos irregulares”, según el lenguaje utilizado para presentar su renuncia voluntaria “para evitar daños al Partido”.
Curiosamente, desde los medios afines, (casi todos), al PP, se ha presentado el ciertamente vergonzoso caso del Tito Berni, como una corrupción cutre y chusca en lo que parece dar a entender que ellos defienden la corruPPción de la “gente de bien”, una corrupción más fina, más de clase, de alta clase, como si hubiera también diferentes formas de corrupción.
El caso es que, desgraciadamente, en algún sector de la sociedad calan estos mensajes y muchos consideran más graves unos casos que otros e incluso se condona la corrupción propia y se carga contra la “de los otros
El caso es que, desgraciadamente, en algún sector de la sociedad calan estos mensajes y muchos consideran más graves unos casos que otros e incluso se condona la corrupción propia y se carga contra la “de los otros”. Y lo que es más triste, en algunos momentos y lugares se ha premiado electoralmente a los corruptos que además han sido ensalzados como ‘listos’ y, en lugar de ser sancionados socialmente, han sido más envidiados que criticados.
Así parece que debe considerar Moreno Bonilla y Núñez Feijóo el asunto marbellí, que no ve nada extraño en la organización criminal dedicada al narcotráfico de marihuana y hachís entre Andalucía y Suecia y al blanqueo de capitales, en la que aparecen salpicados como cabecillas el marido de la alcaldesa de Marbella y senadora y el hijastro. Al presidente de la Junta y al líder de la oposición no les debe parecer extraño este asunto y quieren separar de su implicación a Ángeles Muñoz, aunque todos conozcamos lo de “Ahora hemos ganado nosotros también. Porque ahora tenemos la Junta de Andalucía. Tenemos Marbella. Tenemos Estepona. Tenemos todo. La ciudad es nuestra. Básicamente, tenemos toda la jodida Andalucía”, salido de la boca de Joakim Broberg, el hijastro de la Titi, en conversación con su “socio” Mark Holmen, que constan en el informe de la Unidad de Delitos Económicos y Fiscales al juez Castellón.
Tampoco debe parecerles mal la conversación entre Villarejo, y el entonces número dos del Ministerio de Interior en 2014, Francisco Martínez, en las que se revela que ya se conocía la trama de narcotráfico y blanqueo de capitales que operaba en Marbella: “Pegan unos palos de la hostia”, refiriéndose a las mordidas del marido y el hijastro de Ángeles Muñoz
Tampoco debe parecerles mal la conversación entre Villarejo, y el entonces número dos del Ministerio de Interior en 2014, Francisco Martínez, en las que se revela que ya se conocía la trama de narcotráfico y blanqueo de capitales que operaba en Marbella: “Pegan unos palos de la hostia”, refiriéndose a las mordidas del marido y el hijastro de Ángeles Muñoz.
Pero la Titi, dicen sus protectores, no tiene nada que ver en el asunto a pesar de que es sabido que la alcaldesa habría otorgado contratos millonarios a miembros de la trama y a las empresas que blanqueaban el dinero del narcotráfico. ¡Vaya tela la de la relación de los dirigentes populares con los capos de la droga! Y no debe parecerles raro tampoco que la alcaldesa acumule un patrimonio bestial (12 millones de euros) en unos cuantos años, muy superior a los ingresos obtenidos en sus múltiples cargos. Es extraordinaria la capacidad de ahorro de algunos cuando a tantos españoles les sobra una semana para llegar a fin de mes o les falta un cuarto (por lo menos) de sueldo. El descaro con el que exhibe su opulencia la alcaldesa de Marbella, conocida también como ‘Lady Chanel’ o ‘Lady Luxemburgo’ es insultante y el patrimonio acumulado ‘trabajando honradamente’ (5 viviendas, 2 naves industriales, oficinas, coches de carreras, un atraque…) no se lo salta un torero.
Para el PP las explicaciones de Ángeles Muñoz dadas internamente son “suficientes” y tampoco ven nada extraño en que en 2020 recibiera una ‘donación’ de 3 millones de euros, suponemos de un admirador de su labor como alcaldesa, que se le olvidara inscribir, (a todos nos puede pasar que no recordemos donde hemos ‘colocado’ unos cuantos millones de euros)
Para el PP las explicaciones de Ángeles Muñoz dadas internamente son “suficientes” y tampoco ven nada extraño en que en 2020 recibiera una ‘donación’ de 3 millones de euros, suponemos de un admirador de su labor como alcaldesa, que se le olvidara inscribir, (a todos nos puede pasar que no recordemos donde hemos ‘colocado’ unos cuantos millones de euros); dicen los del PP que la compra de una finca en Marbella, tras blanquear 230.000 euros a través de una sociedad panameña, son cosas de la familia de la alcaldesa en las que no hay que meterse. Y se quedan tan panchos.
En mi opinión “los otros” y “los unos”, todos los corruptos, son lo mismo, pero hay que distinguir cómo combaten la corrupción unos y otros y cómo reaccionan, en estos momentos, unos partidos políticos y otros ante la aparición de estos casos
En mi opinión “los otros” y “los unos”, todos los corruptos, son lo mismo, pero hay que distinguir cómo combaten la corrupción unos y otros y cómo reaccionan, en estos momentos, unos partidos políticos y otros ante la aparición de estos casos. Los partidos deben mejorar los mecanismos de control interno y de disciplina para detectar, en su caso, y atajar de inmediato esos comportamientos. Es necesaria la tolerancia cero frente a la corrupción, venga de donde venga.
Lo que no es de recibo es que se considere más graves unos casos que otros y que incluso en ocasiones se disculpen algunos casos en función de la procedencia. Y ya el remate ha sido cuando en determinados momentos y lugares se ha ‘premiado’ electoralmente a los corruptos. Mi teoría es que por desgracia muchas personas empatizan con los corruptos e incluso se ha ensalzado como listos a muchos de ellos y el problema es que en el fondo hay demasiada gente que los envidia más que los sanciona.
Que en sus distintas versiones el viejo dicho “A mí no me den, póngame donde haya”, (aunque lo parezca no es una frase del rey emérito), siga teniendo tanto éxito y defensores, una expresión que supone el desplazamiento de lo ético por lo estético, dice mucho de una sociedad que debe regenerarse y desterrar el discurso que normaliza este proceso
Que en sus distintas versiones el viejo dicho “A mí no me den, póngame donde haya”, (aunque lo parezca no es una frase del rey emérito), siga teniendo tanto éxito y defensores, una expresión que supone el desplazamiento de lo ético por lo estético, dice mucho de una sociedad que debe regenerarse y desterrar el discurso que normaliza este proceso. Tendríamos además que ser más beligerantes con las dos partes necesarias para la corrupción y aplicar una deriva de la Ley de Mahoma, “tan corrupto es el que da como el que toma”. En ese sentido da risa escuchar a algunos empresarios del caso del Tito Berni denunciar que habían sido estafados y no se habían cumplido los encargos por los que habían pagado.