En el día de la Constitución, la reflexión me lleva hacia esas zonas de Granada a las que esta constitución no llega.

Ya va para dos décadas que se diseñó, junto con los vecinos y vecinas del Distrito Norte de Granada, un plan integral tan ambicioso como olvidado. Fue durante el denostado "tripartito" de 1999, cuando cogobernaban la ciudad PSOE, IU y PA, cuando se redactó este plan. Nada quedaba fuera del propósito de acabar de una vez por todas con la marginación de las decenas de miles de personas que habitamos ese distrito: desde la salud al medio ambiente urbano y desde la educación a la participación ciudadana o el empleo.

Las herramientas de transformación existen. Sólo falta voluntad de usarlas

Luego llegaron las elecciones y el gobierno de la derecha, algunos de cuyos representantes me espetaron en la cara un demoledor y elocuante "tú y yo sabemos que esa zona jamás va a cambiar" y el plan se cerró. Más tarde aún, llegó el boom del ladrillo que estimuló que una generación entera dejara los estudios antes de empezarlos y que enmascaró la pobreza, cuando en realidad estaba agravándola. Por fin llegó esta larga crisis y el barrio se hundió por completo, mientras las administraciones pregonaban no tener dinero (y menos para esto).

Así llegamos al 2017. Con más necesidad que nunca de transformar el barrio. Los que eran jóvenes marginados y en paro en 1999 son ahora adultos marginados y en paro, padres de jóvenes en una situación igual o peor que la que ellos tenían hace tres alcaldes. Los chavales y chavalas que llenan nuestras plazas de lunes al sol a lunes al sol, son ya excluidos de tercera generación que han mamado en sus casas que no hay futuro.

Pero las herramientas de transformación existen. Sólo falta voluntad de usarlas. Dentro de una semana, el 15 de diciembre, termina el plazo para presentar ante la UE solicitudes de fondos FEDER para el Desarrollo Urbano Sostenible, en cuya convocatoria se establece, en la línea 9, como uno de sus objetivos prioritarios la "prestación  de  apoyo  a  la  regeneración  física,  económica  y  social  de las  comunidades  de  las  zonas  urbanas  y  rurales  desfavorecidas" Son más de 100 Millones de Euros, sólo para Andalucía, los que hay disponibles para este tipo de iniciativas. Estos planes existen como concreción de lo comprometdo por España y la Unión Europea tanto en la "Declaración de Toledo" como en los objetivos del milenio de Naciones Unidas, que consideran la pervivencia de "barrios desfavorecidos dentro del contexto global de la ciudad, que profundizan la polarización social y provocan por tanto un mayor riesgo de potencial fractura social" uno de los principales retos a los que tienen que responder las economías y sociedades europeas.

Algunos movimientos del barrio, al igual que la fuerza política a la que pertenezco, llevamos casi dos meses pidiéndole al alcalde, el Sr. Cuenca, que tenga a bien recibirnos para hablar del Distrito Norte 

Algunos movimientos del barrio, al igual que la fuerza política a la que pertenezco, llevamos casi dos meses pidiéndole al alcalde, el Sr. Cuenca, que tenga a bien recibirnos para hablar del Distrito Norte y los fondos europeos. Granada está a punto de perder la oportunidad de percibir fondos millonarios para la transformación del Distrito Norte. Fondos específicamente orientados para ello, para lo que parece no ser una prioridad para este gobierno del PSOE que, en esto, parece diferenciarse poco del de Torres Hurtado.

Es nuestro derecho humano y constitucional. Porque en el barrio hay mucha gente de lucha, muy concienciada, muy preocupada y con muchas ideas y ganas de mejorar las cosas, pero que no encuentra en los gobiernos, nadie que se tome en serio las posibilidades de mejora que el barrio tiene. Gente que también somos Granada, aunque no lo parezca.

No nos engañemos. Ya no queda tiempo. En una semana no se puede preparar una solicitud de fondos FEDER. Granada perderá también este tren. Cuando sigamos viendo, ustedes en los periódicos y los vecinos en nuestras calles de Norte, el desastre humanitario de la infravivienda, los apagones, el paro juvenil, el fracaso escolar y el deterioro de la convivencia, recuerden que una parte esencial de la culpa, está en los sillones de gobierno de la Plaza del Carmen.