Rosa María Muñoz, secretaria de Mujer y Igualdad de UGT Granada, denuncia que "la violencia machista no desaparece debido a que se mantienen los estereotipos sexistas en nuestra sociedad, la ausencia de políticas educativas igualitarias, la precariedad laboral, así como la insuficiencia de recursos públicos destinados a la prevención, protección y atención a las víctimas".

La ugetista destaca la importancia de luchar contra la violencia de género desde el ámbito laboral, reforzando la acción sindical, la formación y la sensibilización para alcanzar la igualdad real y efectiva de mujeres y hombres, potenciar la negociación colectiva, con medidas de acción positiva y planes de igualdad para difundir y mejorar los derechos laborales y la igualdad de oportunidades, así como la colaboración y actuación con otras organizaciones como las administraciones públicas, asociaciones de mujeres, etc., para erradicar todo tipo de violencia contra las mujeres.

Así, Muñoz subraya la urgencia de implementar las medidas contempladas en el Pacto de Estado contra la violencia de género aprobado en 2017 y que se activen todos los mecanismos y recursos necesarios para mejorar la protección jurídica e institucional de las víctimas, mujeres y menores, y la aplicación del Convenio de Estambul, que amplían el concepto de violencia de género a todas las violencias machistas: violencia sexual, laboral, institucional, el acoso sexual y otras violencias no infligidas por la pareja o expareja. Y concluye exigiendo justicia y reparación a las víctimas, así como formación para jueces y magistrados que manifiestan "desconocimiento y falta de sensibilidad hacia el gravísimo problema de la violencia contra las mujeres".

Desde CCOO, la responsable de Mujer, Eva Calderón, ha calificado como "alarmantes" las cifras de asesinatos y denuncias por violencia de género que se producen cada vez con más frecuencia. Esto significa, en su opinión, que las políticas institucionales para poner freno a todo tipo de violencia contra las mujeres han fracasado. En Granada, ha afirmado la responsable sindical, estamos hablando de 4.082 denuncias por violencia de género en 2017 y 1.602 en 2018. Y lo que desde CCOO nos preocupa mucho también son las renuncias por parte de algunas mujeres que presas del miedo deciden no continuar el proceso, lo que debe abordarse desde la atención jurídica, psicológica y servicios sociales para las víctimas. Igualmente alarmante es el número de órdenes de protección denegadas, el 30% este año 2018, requisito imprescindible para activar los sistemas de prevención y acceso a los derechos laborales y recursos económicos de las mujeres que denuncian. 

En el ámbito laboral, Eva Calderón ha insistido en la necesidad de trabajar conjuntamente los sindicatos y las organizaciones empresariales para establecer protocolos que garanticen los derechos laborales de trabajadoras en situación de violencia, y desde CCOO demandamos una implicación más activa por parte de la Inspección de Trabajo, cuando las víctimas sufran perjuicios en el ámbito laboral.  En definitiva, medidas reales y efectivas para el fomento del empleo y la mejora de los derechos laborales y económicos de las mujeres víctimas de violencia de género. 

Las representantes sindicales han hecho un llamamiento a toda la ciudadanía para que participe el próximo domingo, 25 de noviembre, en la manifestación que saldrá a las 12:00 horas desde la Plaza Isabel La Católica hasta el Kiosco de la Música (Paseo del Salón) convocada por la Plataforma 25 de Noviembre de Granada, de la que forman parte los dos sindicatos.