En 17 minutos, un espectáculo de luz, sonido y fuegos artificiales permitieron a los santaferinos y visitantes que abarrotaron la Plaza de España presenciar uno de los inicios de fiestas más particulares que existen en la provincia granadina, donde el 'hechizo' hace que se dejen a un lado todas las tristezas para vivir intensamente cinco días de programación.

 

El Penas es un acto exportado desde Nuevo México en 1985 y consiste en la quema de una falla basada en una temática, que este año ha tenido como imágenes protagonistas símbolos contra el 'bullying'. A la hoguera lanzaron los santaferinos y visitantes los papelitos con las tristezas que les han rodeado en el último año, para que ardieran y olvidarlas antes de comenzar cinco días de diversión.

 

La música de Hans Zimmer fue parte de la gran protagonista de la noche y contribuyó a sumergirse en el mágico espectáculo, en el que los focos simularon lápices de colores y las torres de la Iglesia de la Encarnación se tiñieron de naranja en un claro gesto hacia los niños pelirrojos, contra quienes el acoso escolar se ensaña en muchas ocasiones. 

 

Después de teñirse con los colores de la bandera de Santa Fe -verde, blanca y roja-, la fachada del histórico templo fue mezclando tonalidades y colores y emitió luz desde su interior. 

 

Para su organización se han empleado 50 robots de última generación leds, 50.000 vatios de iluminación y 30.000 rms de sonido, además de 1.881 disparos de la pirotecnia Esteban Martín, procedente de Motril. 

 

Previamente al inicio de El Penas el alcalde de la localidad, Manuel Gil, saludó a los vecinos desde el balcón del Ayuntamiento al tiempo que les instó desde esta tradición santaferina a "quemar todos los males y denunciar más que nunca el bullying escolar y cualquier otra forma de acoso". 

 

A la cita acudió la delegada del Gobierno en funciones, Inmaculada Oria, quien destacó el "espectacular fervor y pasión viven los santaferinos este inicio de las fiestas", al tiempo que realzó la "simbología que tiene" al quemar todas las penas y tristezas en la falla. 

 

Las fiestas continúan este viernes con una programación dirigida a todos los públicos, entre las que destaca la exposición conmemorativa con las carocas finalistas y ganadoras de los últimos 30 años que tendrá lugar en el patio del Centro Damián Bayón.

 

La música tampoco faltará en estos días, de modo que la verbena, tras ser inaugurada este jueves por la Orquesta Roma; le seguirá este  viernes la Orquesta Amadeus; el sábado La Tentación; y el domingo cerrará las noches musicales la orquesta local Ándalus. 

 

Entre las novedades, habrá un Gran Prix con vaquillas en la Plaza de Toros de Santa Fe, y se instalará una gran pista americana en la Plaza de España con calle Isabel la Católica. El viernes y sábado, el protagonista será el Teatro de Calle también en la Plaza de España para animar el centro de la ciudad, ha destacado Marcos, y “tener actividades que reúnan a las familias”. 

 

No faltará la tradicional romería que congregará a más de 2.000 personas; la fiesta del agua, pasacalles, concentración de bicicletas clásicas, concierto de la Banda de Música o la cabalgata de feria.

 

El concejal de Fiestas, Carlos Marcos, ha precisado que las fiestas son para los niños y las familias, otorgándoles el protagonismo de las actividades que convierten a Santa Fe en un lugar de obligada visita en los últimos días de agosto.